La Delegación en Madrid de la Asociación Española de Ingenieros de Telecomunicación, AEIT-Madrid, celebró el pasado 25 de marzo la sexta edición de Un Café Con…, unos encuentros distendidos en los que se analizan con diferentes profesionales relevantes del sector de las telecomunicaciones, inquietudes, puntos de vista y temas de actualidad.
Estas charlas, moderadas por Víctor Valle, secretario de la AEIT-Madrid, tienen el objetivo de acercar diferentes temas actuales y de interés a los asociados y a todo el sector de las TIC.
En esta ocasión, Un café con… contó con la participación del ingeniero de Telecomunicación Enrique J. Gómez Aguilera, quien hizo un recorrido histórico de la Ingeniería Biomédica en España, repasó los retos y oportunidades a los que se enfrenta esta disciplina y las estrategias que hay que poner en marcha.
El profesor Gómez Aguilera destacó el nivel de cantidad en el que nos encontramos en cuanto a la formación de ingenieros biomédicos en España: “en los últimos años, la evolución en el desarrollo de la ingeniería biomédica ha sido exponencial y fantástica. Desde 2009, se pueden encontrar grados especializados en esta disciplina que cuenta con alumnos muy vocacionales que quieren dedicarse a este mundo interdisciplinar y a esta interfaz entre la tecnología y el ser humano. Se trata de un perfil profesional cada vez más demandado con muchas capacidades formativas y de habilidades”. Además, expuso la gran vinculación histórica entre esta disciplina y la ingeniería de telecomunicaciones que ha conseguido que más de 3000 alumnos de ingeniería de telecomunicación se formen en el campo de la bioingeniería: “Encontramos multitud de compañeros trabajando en prácticamente todas las empresas de ingeniería sanitaria y en hospitales”.
Otro de los aspectos clave de este encuentro fue la pandemia y el papel de la ingeniería biomédica en esta crisis sanitaria; en su opinión, “la pandemia nos ha mostrado la realidad. Se ha demostrado una debilidad y dependencia del mercado exterior, y es fundamental que contemos con una infraestructura de tecnología sanitaria. Existe una limitación en transferencia tecnológica en tiempo y calidad y todo ello requiere una inversión en tecnologías made in Spain y una apuesta por parte de las instituciones públicas”.
A pesar de ello, Enrique Gómez considera que la ingeniería biomédica ha jugado un papel magnífico en esta crisis, permitiendo que tecnologías como las imágenes médicas hayan sido fundamentales para diagnósticos y complicaciones asociadas a la Covid-19, o los ventiladores mecánicos que han ayudado a salvar muchas vidas. Sin olvidar la telemedicina: “una de las tecnologías más relevantes durante la pandemia”.
Esta telemedicina debe ser un acto médico en el que existan condiciones que permitan al profesional sanitario y paciente tengan una calidad adecuada de comunicación y acceso a los datos, y todo ello será posible gracias al 5G. Para el ingeniero de telecomunicación: “el problema no está en digitalizar la información, sino en utilizar las herramientas que tenemos para cambiar el sistema sanitario y los procesos asistenciales”.
Actualmente la madurez digital del sistema sanitario se encuentra en un 31% pero, se espera que el 5G aporte un gran impulso y que la telemedicina cambie radicalmente: “el 5G permite la aparición de otros escenarios como hospitales inteligentes, los servicios de emergencia o quirófanos inteligentes, todo ello dentro de un entorno y oportunidad única que son los fondos de recuperación y resiliencia”.
Para Enrique Gómez, España tiene un sector con potencial de mayor internacionalización, pero “tiene que tener más músculo. España tiene unas características especiales, somos un país que atrae turismo y cada vez el binomio salud y turismo es más frecuente. Debemos ofrecer un turismo de calidad y un turismo de salud, y en esto la ingeniería biomédica y la tecnología sanitaria pueden tener un papel clave para conseguir ser líderes europeos”.