El presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor ha calificado de “grave problema” la situación de intrusismo que viven el conjunto de las profesiones sanitarias y ha reclamado medidas al Gobierno para atajar un problema que “cada día va a más”.
Según ha indicado Amor, durante una comparecencia ante la Comisión de Sanidad del Congreso, que la pandemia por Covid-19 ha agravado una situación “acentuando un problema que ya resulta endémico”.
Para el presidente de ATA, “si el intrusismo es nefasto en cualquier actividad, es mucho más nocivo en este ámbito ya que pone en grave riesgo al paciente y deja su salud en manos de personas no cualificadas”.
Amor ha recordado ejemplos como los “falsos fisioterapeutas” que dan masajes en las playas, o la cantidad de cirujanos plásticos sin cualificación y a los que acuden los ciudadanos por desconocimiento. Igualmente ha alertado de las páginas webs, con apariencia profesional que ofertan tratamientos y medicamentos, careciendo plenamente de acreditación y sin garantizar la seguridad de los fármacos.
En un plano más profesional, Amor ha demandado también al Gobierno que fije unos honorarios de referencia para los autónomos que trabajan en la sanidad privada. Según ha explicado que desde 1989 no se publican los precios de referencia que se usan para pagar a los sanitarios. En su valoración, las bajas tarifas que existen en algunos casos, “puede poner en grave riesgo la seguridad del paciente ya que para poder subsistir muchos profesionales del sector privado tienen que atender a demasiadas personas al día”, percibiendo en muchos casos unas cantidades “ridículas”.