La Consejería de Salud y el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Asturias (COF) han puesto en marcha un circuito de resolución ágil para resolver incidencias relacionadas con la receta electrónica, de manera que se garantice la seguridad del tratamiento de los pacientes. Se trata de un sistema de comunicación entre la farmacia comunitaria y los médicos de los centros de salud que permite poner en común situaciones que se manifiestan en las oficinas de farmacia y que pueden tener importancia para los usuarios.
Desde su puesta en marcha de forma piloto en enero de 2023 en cinco centros de salud del área sanitaria V, el proyecto se fue extendiendo a otras zonas a lo largo del año. En total, se han tramitado a través de este procedimiento 23.631 incidencias, con un índice de resolución del 97,2%.
En la mayor parte de los casos, las notificaciones tienen que ver con el vencimiento de la fecha de renovación de la receta electrónica o el margen de recogida (64,1%) o con problemas de dosificación (5,3%), pero también se abordan situaciones más complejas que pueden ser críticas para los pacientes, como el desabastecimiento (3,7%), la duración incorrecta del tratamiento (2,4%), la sospecha de reacción adversa (0,1%) o la intolerancia (0,1%).
Otras situaciones que también se dan son, por ejemplo, la necesidad de localizar al paciente, la interacción clínicamente relevante con otros medicamentos, problemas con el uso o administración del fármaco, incidencias con el visado o una valoración farmacéutica inadecuada sobre el abuso o la dependencia del medicamento.
El protocolo establece dos tipos de incidencias –urgentes y no urgentes- y fija unos plazos para su resolución: Las urgentes afectan a aquellos medicamentos cuya falta supone un riesgo para la salud del paciente o bien a errores en la dispensación con posibles consecuencias adversas. Estas incidencias deben quedar resueltas en la misma mañana en la que se registra la notificación o a primera hora de la tarde si se produce en el tramo entre las 14.00 y las 15.00 horas. Para las no urgentes el tiempo de resolución es de 72 horas.
Para la consejera de Salud, Concepción Saavedra, esta actuación es una muestra más de la capacidad de innovación de la red de atención primaria: “Cuando detecta un área de mejora, consigue llegar a acuerdos con todos los agentes implicados, desarrolla una herramienta segura y eficaz, la somete a las pruebas necesarias y la implanta progresivamente en el sistema sanitario para conseguir una prestación farmacéutica de más calidad y más segura”.
La directora general de Planificación Sanitaria, Montserrat Bango, por su parte considera que este protocolo abre las puertas del centro de salud a la farmacia comunitaria. “Este hecho permite que los médicos de familia recuperen tiempo de consulta para atender a otros pacientes, lo que pone en valor el papel del farmacéutico comunitario como parte del sistema sanitario”, ha valorado.
A la vista de los resultados, la Consejería de Salud y el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Asturias han acordado la extensión del proyecto hasta completar todas las áreas sanitarias y oficinas de farmacia del Principado.