JUEVES, 9 de julio de 2015 (HealthDay News) -- Se espera que las muertes por enfermedades relacionadas con la presión arterial en EE. UU. se reduzcan sustancialmente en las próximas décadas, debido a la mejora en la cobertura médica provista por la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio, informa un estudio reciente.
El aumento en el tratamiento de la hipertensión bajo la legislación del cuidado de la salud, conocida comúnmente como "Obamacare", salvará las vidas de entre 95,000 y 222,000 adultos no mayores para el año 2050, estiman los investigadores. Esa cifra equivale a hasta 6,000 personas al año que de otra forma morirían por la enfermedad cardiaca.
En 2050 también podría haber 408,000 casos menos de enfermedad cardiaca y accidente cerebrovascular (ACV) entre los 55 millones de estadounidenses jóvenes y de mediana edad que sufren de hipertensión, encontraron los investigadores.
Esas cifras se basan exclusivamente en el mayor acceso de los pacientes a los antihipertensivos como resultado de la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio, señaló la autora principal del estudio, Suhui Li. Li es profesora asistente de políticas y gestión de la salud de la Facultad de Salud Pública y Servicios Sanitarios de la Universidad de George Washington en Washington, D.C.
"Es importante mantener presente que no estudiamos otros beneficios de salud logrados por la mejora en la cobertura, como una mejor detección y gestión de las enfermedades crónicas", planteó Li. Si lo hubieran hecho, el número estimado de vidas salvadas probablemente sería más alto, dijo.
Unos 78 millones de estadounidenses (uno de cada tres adultos) sufren de hipertensión, según las notas de respaldo de los autores del estudio. La hipertensión contribuye al 35 por ciento de todos los ataques cardiacos y ACV, y al 49 por ciento de los casos de insuficiencia cardiaca.
Las encuestas nacionales de 2011 y 2012 encontraron que menos de tres cuartas partes de las personas con hipertensión toman fármacos para la afección, y solo la mitad tenían su hipertensión bajo control, informaron los autores del estudio.
"La primera causa de muerte en nuestra sociedad es la enfermedad cardiaca, y la quinta es el ACV, y la hipertensión es un factor de riesgo importante de ambas afecciones", señaló el Dr. Elliot Antman, decano asociado de investigación clínica/traslacional de la Facultad de Medicina de la Universidad de Harvard, en Boston.
Investigaciones anteriores han mostrado que las personas hipertensas sin seguro tienen 4.4 veces más probabilidades de no recibir la atención médica y los fármacos que necesitan, en comparación con las aseguradas, señalaron los autores del estudio.
"Es muy triste cuando aunque un individuo deseara controlar su presión arterial, quizá no podría hacerlo porque no puede costearse las recetas que necesita", lamentó Antman, ex presidente de la Asociación Americana del Corazón (American Heart Association), que no participó en el estudio. "Es irresponsable que nuestra sociedad no le ayude".
En el nuevo estudio, que aparece en la edición de julio de la revista Preventing Chronic Disease, el equipo de Li creó un modelo que estimaría el impacto de una mejor cobertura de seguro sobre el tratamiento de la hipertensión.
El modelo supuso conservadoramente que los 21 estados que no han aceptado la ampliación de Medicaid ofrecida bajo la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio seguirían con su oposición hasta 2050. Según la ampliación, las personas que ganan hasta un 138 por ciento del nivel de pobreza federal (de 16,243 dólares para una sola persona y de 33,465 dólares para una familia de cuatro) calificarían para la cobertura de Medicaid.
Incluso así, ampliar la cobertura de seguro médico y el acceso a la atención mediante la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio aumentaría el tratamiento de la hipertensión en un 5 por ciento, estimaron los autores del estudio.
Eso conduciría a al menos 111,000 casos menos de enfermedad cardiaca y 63,000 ACV menos, según sus hallazgos. Los ahorros potenciales en el costo irían de entre 1.2 mil millones de dólares y 2.8 mil millones de dólares al año.
"Incluso con una mejora de apenas un 5 por ciento, esto conducirá a salvar más vidas y a evitar más enfermedades", aseguró Li.
Los grupos minoritarios tendrían las mayores mejoras en la salud, dijeron los investigadores. Los hispanos son los que más se beneficiarían, proporcionalmente, de una expansión en la cobertura, porque tienen la tasa de cobertura de seguro anterior a la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio más baja entre todos los grupos raciales y étnicos, mientras que los negros recibirían unos beneficios proporcionablemente mayores que los blancos porque tienen las tasas más altas de hipertensión y factores de riesgo de la enfermedad cardiaca.
Antman dijo que la Asociación Americana del Corazón espera que los estados que se oponen a la ampliación de Medicaid cambien de postura basándose en información como esta. Apuntó que muchos de los estados que se oponen a la ampliación de Medicaid están en el sur y en el oeste medio.
"Es el cinturón del ACV", dijo Antman. "Si uno se preguntara en qué lugares hay una necesidad particular de controlar mejor la hipertensión, son los estados que probablemente lo necesiten más que ningún otro".
Artículo por HealthDay, traducido por Hola Doctor
FUENTES: Suhui Li, Ph.D., assistant professor, health policy and management, George Washington University School of Public Health and Health Services, Washington, D.C.; Elliott Antman, M.D., immediate past president, American Heart Association, and associate dean for clinical/translational research, Harvard Medical School, and senior cardiovascular physician, Brigham and Women's Hospital, Boston; July 2015, Preventing Chronic Disease