Podemos ha presentado un nuevo modelo de copago farmacéutico que establece límites máximos de aportación trimestrales para todos los tramos de renta, extendiendo las limitaciones existentes en la actualidad para los pensionistas a todos los beneficiarios del Sistema Nacional de Salud.
Este partido ha presentado en el Congreso de los Diputados una Proposición No de Ley (PNL) en la que se insta al Gobierno a adoptar una serie de medidas para reformar el actual sistema de copago farmacéutico y que, lejos de procurar la eliminación de los copagos, los ordena de forma que no supongan un peso excesivo en el gasto familiar para todas aquéllas personas con rentas inferiores a 60.000 euros anuales. De este modo, el grupo de Pablo Iglesias estaría concretando en qué consiste su apoyo a la propuesta contenida en el acuerdo entre PSOE y Ciudadanos de "evitar que el copago afecte a los tratamientos y modularlo en función de criterios de necesidad y cronicidad".
La formación de los círculos ha establecido, según la propuesta firmada por su portavoz en Sanidad, Marta Sibina, y el portavoz adjunto de la formación, Xavier Doménech, una tabla de aportaciones máximas en función de la renta, aunque no ha propuesto cambios en los porcentajes de aportación actual (ver tabla en pdf). Otra de las novedades que introduce este modelo de copago es la exención total del mismo para determinados medicamentos que sean considerados esenciales en patologías crónicas y presenten una buena relación coste efectividad.
De este modo, el porcentaje máximo de su renta anual que un paciente destinaría a medicamentos, según las tablas de Podemos, sería de un 2,1% para un paciente con rentas de 35.200 euros que alcanzara en cada trimestre el límite máximo de 185,25 euros. Para los pacientes con rentas entre 12.450 y 20.200 euros, el porcentaje máximo iría de 0,79% a 0,49%, para las rentas entre 20.200 y 35.200, la aportación máxima iría del 1,1% al 0,63% y para los pacientes que alcanzaran los 60.000 euros de renta anual, su máximo se situaría en el 1,24%.
Podemos ha visto, al igual que el informe del Defensor del Pueblo, que el principal problema del copago farmacéutico no se produce en los pensionistas ya que disfrutan de límites a su aportación. Los más perjudicados son familias de muy escasos recursos económicos, activos, y que no pueden ser encuadrados en ninguno de los supuestos de exención y que, por tanto, deben abonar el 40% del importe de sus medicamentos. Por ello, la formación de Pablo Iglesias identifica a las personas menores de 65 años con enfermedades crónicas y de clase social baja como los colectivos en mayor riesgo por causa del copago.
Otra de las situaciones que la formación de los círculos ha identificado como problemático en este ámbito es la desfinanciación de medicamentos y, por tanto, la obligación de pago del 100% para estos productos. Podemos considera que la desfinanciación se hizo “sin tener en cuenta el valor terapéutico” de los medicamentos afectados. Por ese motivo, en la PNL también aboga por “introducir en la financiación pública aquéllos medicamentos dirigidos al tratamiento de síntomas menores que muestren un valor terapéutico y una relación de coste-efectividad favorable”.
Además, la PNL insta a implantar “de forma inmediata” un mecanismo de evaluación periódica sobre los copagos dada la importancia que pueden tener para identificar los colectivos “en mayor riesgo de padecer la denominada probreza farmacológica, monitorizando los posibles problemas de adherencia relacionada con la incapacidad económica para el acceso a los medicamentos”.
A pesar de todo, la formación de los círculos da algún bandazo que otro y en la defensa que su portavoz Rafael Mayoral ha hecho de la Proposición de Ley 25 de Emergencia Social este miércoles, cuatro días después de presentar la PNL en el registro del Congreso, ha abogado de nuevo por la eliminación del Real Decreto-ley 16/2012 y abolir cualquier tipo de copago. El tiempo dirá qué postura es la que finalmente mantendrá el partido de Pablo Iglesias.