Nueve de cada diez españoles (92,6%) acuden a un profesional de la salud a la hora de pedir consejo sobre fotoprotección, según el IV Estudio CinfaSalud: “Percepción y hábitos de salud de la población española en torno a la fotoprotección”, avalado por la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV).
En concreto, seis de cada diez encuestados (62,4%) afirman recurrir a su farmacéutico para asesorarse sobre fotoprotección, porcentaje tan solo superado por el de quienes acuden al dermatólogo (73,5%). El médico de cabecera constituye la tercera fuente de consulta más popular (53,8%) y le sigue, muy por detrás, el personal de enfermería, al que pregunta el 11,8% de los españoles. El buscador Google (11,4%), el dependiente de la perfumería (6,1%), los amigos (5,1%) y las redes sociales (1,7%) son el resto de fuentes de información consultadas, mientras que el 5,7% de los encuestados asegura no necesitar consejo.
La investigación se ha basado en un cuestionario online realizado a una muestra representativa de 3.000 mujeres y hombres de nuestro país, de entre 18 y 64 años, residentes en todas las comunidades autónomas. En ellos, el 57,8% pertenece a los fotototipos más claros (I, II y III), con mayor proporción de mujeres que de hombres.
El cáncer cutáneo (80,1%), seguido por las quemaduras (7,5%) y el envejecimiento de la piel (5,8%) son los efectos perjudiciales del sol que más preocupan a los encuestados. Como apunta el dermatólogo José Carlos Moreno Giménez, Presidente de Honor de la AEDV y Coordinador de la campaña Euromelanoma de la Fundación Piel Sana, “las personas con fototipo I y II deben cuidarse especialmente, pues corren mayores probabilidades de sufrir los efectos negativos del sol, pero, dado que la sobreexposición a las radiaciones solares constituye el principal factor de riesgo, todos sin excepción debemos tomar medidas para protegernos”.
Solo el 2,5% de los españoles se aplica correctamente la crema fotoprotectora
A pesar de que tres de cada cuatro encuestados (76,5%) opinan que el sol puede ser saludable y perjudicial a un mismo tiempo y de que el 15,2% lo considera perjudicial, solo dos de cada cien siguen las tres medidas que garantizan la eficacia del fotoprotector: aplicarse el producto treinta minutos antes de tomar el sol (el 42,5% de los encuestados lo hace), renovarse la fotoprotección cada dos horas (medida que sigue el 33,9%) y reaplicarla tras bañarse o secarse (solo el 24,9%). Uno de cada tres encuestados (36,4%) no sigue ninguna de ellas de forma correcta.
Además, de acuerdo al estudio, siete de cada diez españoles (69,9%) usan la crema fotoprotectora solo al exponerse directamente al sol, frente al 22,2% que lo hace diariamente durante el verano y al 10% que se protege todo el año, como recomiendan los expertos: “Es crucial tener presente que también en el camino a la playa o a la piscina, e incluso mientras damos un paseo al aire libre en invierno, nuestro rostro, manos y otras partes del cuerpo están expuestas a la radiación”, recuerda el doctor Moreno, de la AEDV.
Por otra parte, las cualidades más valoradas por los encuestados en un fotoprotector son que posea un factor de protección (SPF) elevado (73,2%), que esté testado y sea hipoalergénico (52,3%), específico para cara o cuerpo (42,5%), adecuado al tipo de piel (grasa, mixta, seca) (41,6%), de una marca reconocida (33,9%) y su precio (32,6%). El criterio menos valorado es que se anuncie en la televisión (1,7%).
Además, aplicarse la crema fotoprotectora (69,1%), evitar el sol en las horas centrales del día (53,1%), permanecer en la sombra (35,6%) y protegerse con ropa o gafas de sol (31,8%) son las precauciones que toman más a menudo los participantes en la encuesta para protegerse de las radiaciones solares.
Las mujeres, quienes asumen la fotoprotección de los hijos
El 57,5% de los varones participantes en la encuesta no se ocupa de la fotoprotección familiar, responsabilidad que sí asume el 88,5% de las mujeres, bien sea de manera exclusiva (49,5%) o compartida con el padre (39%). En cambio, solo en el 3,5% de las familias españolas son los hombres quienes se encargan siempre de manera exclusiva de esta labor.
Por otra parte, a pesar de que los bebés menores de un año nunca deben ser expuestos directamente al sol, casi la mitad de los padres y madres encuestados (48,8%) lo hace. Como recalca al respecto la doctora Aurora Garre, experta médica de Cinfa, "los niños menores de un año no tienen todavía la capacidad de defenderse del sol mediante el aumento del tono de color o bronceado, lo que deriva en un altísimo riesgo de quemaduras. Por tanto, es crucial extremar las precauciones con ellos durante los días de playa, montaña o juegos y actividades al aire libre, y de ninguna manera exponerlos al sol antes de los doce meses”.
En este sentido, las medidas que aplican los padres encuestados con mayor frecuencia son evitar la exposición de su hijo al sol durante las horas centrales del día (60,6%), usar protección específica para ellos (54,7%), emplear SPF mayor de 50 (52,3%), no exponerles antes del primer año de edad (51,3%) y ponerles una gorra o sombrero (50,2%). Cabe destacar también que uno de cada cinco padres y madres encuestados (21,9%) afirma delegar la protección solar en sus hijos antes de que estos cumplan 13 años. De ellos, un 7,9% lo hace antes de que cumplan los 10 años de edad.
Radiación IR-A, la gran desconocida
Como explica la doctora Garre, “en este estudio CinfaSalud, hemos constatado que, si bien la población es conocedora en gran medida de los efectos nocivos que producen las radiaciones UV, todavía no existe conciencia en nuestro país sobre otro tipo de radiaciones que también son perjudiciales para nuestra piel, como las infrarrojas A (IR-A)”. Así lo demuestra el hecho de que nueve de cada diez encuestados sepan, por ejemplo, que las primeras pueden provocar cáncer cutáneo (91,8%) y quemaduras en la piel (93,5%), mientras que solo uno de cada cinco (20%) conoce que el sol emite radiaciones infrarrojas A (IR-A) y el 65,9% reconoce no saber siquiera qué son.
“La radiación IR-A, que produce sobre la piel una sensación de calor, atraviesa todas las capas de la dermis hasta llegar a la más profunda, la hipodermis, lo que agrava los efectos nocivos de las UV y acelera el proceso de fotoenvejecimiento”, explica la doctora Garre.
Mayor conocimiento, mayor fotoprotección
El nivel de conciencia acerca de los efectos perjudiciales que pueden provocar los rayos solares parece influir en la elección del factor de fotoprotección solar (SPF): el 71,4% de los españoles con mayor conocimiento de las radiaciones UV utiliza factor de protección alto o muy alto (30 o más), casi un 20% más que en 2011 (Estudio Cinfa Fotoprotección 2011). En todo caso, las mujeres (60,1%) se muestran más sensibilizadas que los hombres (39,9%).
Respecto a los falsos mitos e ideas preconcebidas sobre protección solar, el 86,9% de los encuestados piensa, de manera acertada, que las precauciones siguen siendo necesarias bajo la sombrilla y tres de cada cuatro (74,9%), que también los días nublados o de invierno deben tomarse medidas de fotoprotección. En cambio, nueve de cada diez (92,2%) desconocen que el sol recibido a través del cristal normal -no tratado- de una ventana no puede producir quemaduras solares (aunque sí puede provocar otros efectos como el fotoenvejecimiento).
Diez consejos para disfrutar del sol con responsabilidad
Como recuerda la doctora Aurora Garre, “las recomendaciones sobre fotoprotección pueden resumirse en unos sencillos hábitos que, adoptados en nuestra vida diaria, nos permitirán disfrutar del sol y el ocio al aire libre sin poner en riesgo nuestra salud”:
- Evita la exposición solar en las horas centrales del día. Los rayos solares son más fuertes y perjudiciales entre las doce de la mañana y las cuatro de la tarde. También la altitud aumenta la peligrosidad del sol, así como algunos tipos de nubosidad.
- La sombra, tu mejor aliada. Resguárdate de los rayos del sol bajo los árboles o usa una sombrilla, aunque no olvides que su protección no es total, porque algunos tipos de superficies –agua, arena, nieve, hierba- reflejan las radiaciones solares.
- Protégete también en el automóvil. Al elegir tu nuevo coche, recuerda que los cristales más eficaces son los laminados tintados de gris. En el caso de coches ya fabricados, puedes colocar películas plásticas sobre los cristales o tintarlos, siempre de acuerdo a la legislación.
- Consulta los índices ultravioleta (IUV). Antes de la exposición al sol o una actividad al aire libre, conviene informarse sobre la intensidad de las radiaciones a través de canales como la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) o la app solar de Be+: a partir de 6, el riesgo es alto y se deben extremar las medidas de fotoprotección, así como elegir el SPF adecuado.
- Protege tu cuerpo con la ropa adecuada y usa sombrero. Los colores oscuros protegen más que los claros y algunos tejidos, como el algodón, la viscosa, el rayón y el lino, protegen menos que otros como el nailon, la lana, la seda y el poliéster. Respecto al sombrero, uno de ala ancha proyectará sombra a tu rostro y cuello, además de a tu cabeza.
- Utiliza gafas de sol para evitar los daños oculares. Es necesario que las gafas tengan una protección 100% frente a los rayos UV y solo si están homologadas por la Unión Europea, se puede garantizar que así sea. Las que mejor protegen los ojos y la piel que los rodea son las gafas de tipo envolvente.
- Utiliza un fotoprotector adecuado a tu fototipo y a las circunstancias de la exposición. Nunca te apliques factor de protección inferior a 30. Por su parte, las personas de fototipos claros (I y II) deben usar siempre un SPF muy alto (50+) y en cuyo envase se especifique que también protege de la radiación ultravioleta A con el símbolo (UVA). Póntelo media hora antes de exponerte al sol y reaplícalo cada dos horas y tras el baño, acordándote de secar bien la piel antes. Elige, además, bálsamos labiales que contengan filtros solares.
- Educa a tus hijos sobre la necesidad de protegerse del sol. Los niños menores de un año nunca deben ser expuestos directamente al sol y, cuando tienen 2 o 3 años, sus padres deben extremar todas las medidas de fotoproteccion (prendas de vestir, gorros y gafas de sol), así como aplicarles fotoprotectores específicos para niños con SPF 50+ y el símbolo (UVA). Sobre todo, trata de concienciar a tus pequeños de los riesgos que entrañan las radiaciones predicando con el ejemplo.
- No bajes la guardia después del verano. Las radiaciones solares son peligrosas durante todo el año, no solo en verano. Recuerda también, cuando practiques deportes de invierno, que la nieve refleja un 80% los rayos de sol, por lo que debes emplear fotoprotectores con un SPF mayor de 50.
- Mucho cuidado con las salas de bronceado. El bronceado artificial no protege frente al fotoenvejecimiento y conlleva un riesgo de cáncer de piel, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).