El Grupo Parlamentario Socialista ha anunciado el registro de una proposición no de ley en el Congreso de los Diputados para reclamar la inclusión de los sistemas de monitorización continua de glucosa o flash de glucemia en la cartera común de servicios del Sistema Nacional de Salud (SNS). En este sentido, han pedido que se financie con dinero público en los casos "más indicados", así como negociar "un precio asequible" con los proveedores.
La propuesta tiene su origen en una reunión mantenida entre el portavoz socialista de Sanidad, Jesús Mª Fernández, con representantes de la Federación Española de Diabetes (FEDE). Entre las conclusiones del encuentro, Fernández ha destacado que es preciso "hacer más prevención y mejorar el control de la enfermedad", un aspecto, este último, que en su opinión se puede ver favorecido por los nuevos dispositivos de medición continua de la glucosa o flash". Por eso, explica, "hemos presentado esta proposición no de ley, que hemos trabajado junto con la Federación Española de Diabetes, para incorporar estos dispositivos dentro de la cartera común del sistema nacional de salud, en indicaciones precisas".
Junto a esta medida, la proposición del Grupo Socialista ha instado al Gobierno a "elaborar un estudio actualizado en relación con las nuevas informaciones disponibles, opiniones de sociedades científicas y de pacientes, que determina las indicaciones en las que resulta más recomendable los nuevos dispositivos de medición continua o flash de glucemia en pacientes diabéticos". No obstante, piensan que los nuevos dispositivos deberían incorporarse a "la cartera común de servicios” y, por tanto, “su financiación por el Sistema Nacional de Salud, para aquellas indicaciones que resulten más efectivas”.
Por último, de cara a compatibilizar esa inclusión con la sostenibilidad del SNS, Fernández ha pedido al Gobierno que "negocie con los representantes de la industria que fabrica estos dispositivos un precio asequible, reduciendo el impacto presupuestario de su financiación pública", y para conseguir, también, "una reducción de los precios de venta libre para el resto de pacientes diabéticos".