El portal de artículos científicos Springer Link ha recogido un artículo de los autores Hillel P. Cohen, Andrew Blauvelt, Robert M. Rifkin, Silvio Danese, Sameer B. Gokhale y Gillian Woollett, todos ellos asociados a investigaciones o actividaddes patrocinadas por laboratorios, tanto del sector innovador como de genéricos y biosimilares, que, bajo el título 'Switching reference medicines to biosimilars: a systematyc literature review of clinical outcomes', pone de manifiesto la falta de evidencia con respecto a las supuestas pérdidas de eficacia o problemas de seguridad asociados al intercambio entre biológicos originales y biosimilares.
El trabajo se basa en la revisión de 90 estudios seleccionados bajo la premisa de que debían contener información sobre eficacia y seguridad relacionada a un cambio de tratamiento entre el medicamento de referencia y el similar. De estos se excluyeron todos aquellos publicados en habla no inglesa, los que no estaban realizados en humanos, así como los artículos de opinión, editoriales o encuestas. Los estudios seleccionados se referían a un total de 14.225 pacientes. Además, de los 90, 54 giraban en torno a biológicos con mayor complejidad, como los utilizados en el área de Reumatología, y 36 sobre moléculas más pequeñas, incluidas algunas onco-hematológicas, epoetinas o la hormona del crecimiento.
Los autores explican que la revisión se realizó expresamente "para ver si el estudio sobre el cambio entre biológicos respalda o no la hipótesis de que dicho cambio se asocia con alteraciones de las respuestas inmunológicas", las cuales pueden medirse con el uso de inmunoensayos validados (el 41% de los ensayos analizados contenían este tipo de información) y también, de forma indirecta, con estudios de eficacia. Y es que, explican, "si se producen anticuerpos neutralizantes tras la administración de una proteína terapéutica el fármaco resulta inactivo, dando como resultado una eficacia disminuida". "Esta falta de eficacia no se observó en los 53 estudios que carecían de resultados de inmunoensayo", precisan.
Por otro lado, los autores opinan, en lo que respecta a la inmunogenicidad, que "la experiencia con el medicamento de referencia es la mejor fuente de datos sobre qué se puede esperar para un biosimilar, ya que estos han sido recolectados durante al menos una década con la monitorización de la farmacovigilancia del medicamento de referencia antes de la aprobación de cualquier biosimilar y las estructuras primarias de unos y otros son idénticas". Con esto se refieren a los epítopos peptídicos que se presentan a las células T para que estas produzcan una respuesta inmune eficiente. No obstante, puede que los biosimilares contengan epítopos únicos independientes de las células T, por lo que recomiendan "estudiar la reactividad cruzada en la inmunogenicidad de los biosimilares y los medicamentos de referencia" y citan dos estudios con infliximab de referencia y infliximab biosimilar que concluyeron que los pacientes que pierden capacidad de respuesta al infliximab de referencia debido a la aparición de anticuerpos antifármaco "también responderán pobremente al infliximab biosimilar", pero no se asocian problemas específicos al biosimilar.
Del mismo modo, no se detectaron nuevos efectos adversos en ninguno de los estudios de conmutación publicados que no se conocieran de los estudios del medicamento de referencia. "La incidencia de eventos de seguridad en todos los estudios informados fue la misma antes y después del evento de cambio", concluyen y citan como ejemplo el aumento de la aplasia de células rojas puras (APCR) tras un cambio en la formulación de una eritropoyetina. "Al incluir la eliminación del estabilizador de albúmina en suero aumentaron los niveles de impurezas del envase primario, pero el fabricante introdujo una serie de mejoras del producto que restauró la baja inmunogenicidad", señalan.
Un caso y dos estudios sobre el infliximab
También hacen referencia a un informe de caso reciente en el que un individuo desarrolló una enfermedad similar a la enfermedad del suero tras un cambio al infliximab biosimilar, si bien se entiende que esta reacción ocurre habitualmente en la fase posterior (primeros días o semanas) a la exposición a una proteína extraña o un componente del suero. No obstante, esta posibilidad estaba contemplada como efecto adverso tras tratamiento prolongado con infliximab y, aunque los autores admiten carecer de pruebas definitivas para determinar si este caso fue desencadenado por el cambio, afirman que en el informe lo que se destaca es "la necesidad de seguir vigilando la seguridad de todas las terapias basadas en proteínas". Asmismo, restan valor a sendos estudios de Y. S. Kang y Y. Yazici, que apuntaban una posible pérdida de eficacia o alta tasa de abandono al cambio de infliximab de referencia a biosimilar, por el hecho de que sean resultados aislados que no se han correspondido con los otros estudios centrados en dicho cambio.
Para finalizar, los autores hacen referencia a un trabajo de A. Inotai, titulado 'Is there a reason for concern or is it just hype?- A systematic literature review of the clinical consequences of switching from originator biologics to biosimilars', quien se preocupó en identificar todos los artículos en los que se plantearon dudas con respecto al cambio del original al biosimilar, tratando después de buscar la evidencia que las respaldara. "Llegaron a la conclusión de que si bien el riesgo es válido como hipótesis, las afirmaciones no están basadas en una evidencia científica sólida, una conclusión a la que hemos llegado con esta revisión", culminan los autores.