El Consejo de Colegios Oficiales de Farmacéuticos de Cataluña y el Servicio Catalán de la Salud (CatSalut) han presentado un nuevo proyecto centrado en la atención farmacéutica ante primeras dispensaciones, con el objetivo es promover el uso seguro y efectivo de los medicamentos en estas situaciones.
Desde el Consejo catalán explican que el programa se desplegará a través del sistema de receta electrónica, por el cual los farmacéuticos ya están recibiendo un aviso en el momento de realizar una primera dispensación. A principios de año, explican, "está previsto que puedan registrar la actuación que han llevado a cabo, basada en un árbol de decisiones". "De esta manera, se dota de nuevo contenido profesional a este sistema, consolidando y fortaleciendo la red de farmacias de Cataluña", opinan, y aseguran que permitirá disponer de datos registrados de la intervención farmacéutica y reforzar la función asistencial de los farmacéuticos en el sistema sanitario.
Al parecer, el proyecto constará de distintas fases. Para esta primera, la actuación se centrará en cuatro grupos terapéuticos que se han escogido por su relevancia y por la aportación que puede hacer el farmacéutico en la dispensación personalizada: los inhaladores, los anticoagulantes y antiagregantes plaquetarios, las insulinas a pacientes con diabetes tipo II y el glucagón.
Para poder formar parte de este proyecto, será indispensable haber cursado una formación on line gratuita que se ha puesto en marcha a través de Ágora Sanitaria, cuyas inscripciones estarán abiertas hasta el 19 de noviembre.
El curso estaría dividido en tres módulos: uno sobre la importancia de las primeras dispensaciones; otro sobre la intervención que se debe hacer en cada uno los cuatro grupos terapéuticos escogidos, y, por último, el procedimiento de atención farmacéutica en este tipo de dispensaciones. Todo ello, afirman desde el Consejo, "con la finalidad de proporcionar las claves a los farmacéuticos para que puedan realizar una óptima actuación".
Concluyen señalando que esta iniciativa está alineada, por un lado, con la línea estratégica 5 del Pla de Salut 2016-2020 “Política farmacéutica y del medicamento”, concretamente, con el punto 5.2 sobre políticas de prescripción y dispensación; y, por otro lado, respondería a dos de los objetivos del Servicio de Dispensación que contempla el documento de Buenas Prácticas en Farmacia Comunitaria: garantizar que el paciente conoce el proceso de uso de los medicamentos y que lo asumirá y registrar y documentar las intervenciones farmacéuticas realizadas.