La persistencia del coronavirus durante la temporada de gripe constituye, para Farmaindustria una amenaza para la asistencia sanitaria debido a un posible aumento de contagios, hospitalizaciones y muertes.
De hecho, la industria asegura que en 2020 se registró “un incremento sin precedentes en la demanda de vacunas contra la gripe a medida que las autoridades sanitarias buscaban minimizar las enfermedades prevenibles y mantener a personas vulnerables lejos de los hospitales”. Según sus datos se suministraron una media de un 30% más de dosis en Europa para la temporada de gripe 2020/21.
No obstante, en la industria farmacéutica “preocupa” que este año se relajen las políticas de inmunización contra la gripe dados los bajos niveles del virus en circulación debido al generalizado uso de mascarillas y otras medidas de control de la pandemia, como las restricciones en los viajes o el distanciamiento social.
“Los principales epidemiólogos del mundo advierten de que la situación actual desafía seriamente nuestra capacidad para predecir la epidemiología de esta temporada de gripe y, a medida que se relajan los cierres y los controles fronterizos y se reanudan gradualmente los viajes internacionales, la amenaza de un aumento de la circulación de la gripe debe tomarse en serio”, sostienen desde Vaccines Europe, grupo especializado en vacunas dentro de la Federación Europea de la Industria Farmacéutica (Efpia), a la que pertenece Farmaindustria.
Esta dificultad para anticipar el comportamiento de la gripe esta temporada refuerza aún más la necesidad de recordar la importancia de proteger a las personas mayores y a los grupos de riesgo mediante la vacunación, no sólo contra la Covid-19, sino también contra la gripe. “La complacencia, debido a una menor incidencia de la gripe, y el protagonismo de la pandemia pueden obstaculizar la capacidad y la voluntad de las personas para recibir la vacuna contra la gripe. La experiencia reciente en Australia, donde las tasas de vacunación contra el virus de la influenza en 2021 han sido significativamente más bajas que en 2020, es un recordatorio de la importancia de mantener el mensaje sobre el valor de la vacunación”, apunta Vaccines Europe en un comunicado sobre la actual campaña.
La vacunación, y de manera significativa contra la gripe, está considerada como el hito fundamental en la prevención de enfermedades infectocontagiosas, con una repercusión insólita en la salud pública mundial. Con la excepción del acceso al agua potable, ninguna intervención humana puede rivalizar con la inmunización para combatir enfermedades prevenibles y reducir las tasas de mortalidad. No en vano, la situación epidemiológica del mundo ha ido cambiando en paralelo a la incorporación de vacunas a la cartera de servicios de los sistemas sanitarios.
A esto se suma el impacto económico que supone para las cuentas públicas extender la vacunación entre la población, como han demostrado numerosos estudios. Se estima que por cada euro invertido en la vacunación antigripal de las personas de edad avanzada se consiguen ahorros de 1,35 euros en otros gastos médicos.
La combinación de la gripe estacional y la Covid-19 seguirá siendo una amenaza combinada este año, por lo tanto, es fundamental garantizar el mejor uso de las vacunas existentes que han demostrado beneficios para preservar la salud de las personas y evitar la presión constante sobre los sistemas de salud.