La Comisión Europea, a través de su comisaria de Salud, Stella Kyriakides ha demandado este jueves al conjunto de los Estados miembros que “aprovechen” esta fase de mayor calma en la evolución de la pandemia de Covid, para “pasar del modo urgencia, al modo de gestión a largo plazo”, con capacidad “para prever y reaccionar mejor ante futuras crisis”.
La comisaria europea ha aventurado “un posible repunte de casos a partir del próximo otoño”, lo cual obliga a mantener en alto todos los esfuerzos de control y a tomar medidas de resilencia en todos los sistemas sanitarios nacionales.
“Los Estados miembros deben mantener un nivel alto de vigilancia y de preparación en caso de que aparezcan nuevos focos o variantes, porque la pandemia no ha acabado”, ha reiterado Kyriakides, al tiempo que ha hecho un llamamiento a aumentar los esfuerzos en vacunar a la población mundial, “ahora, que el suministro de vacunas no es ya un problema”.
Entre las medidas concretas que reclama la comisaria, pide a los Estados, que de cara a futuros picos, tanto de la pandemia como de la gripe estacional, aumenten la capacidad de las Unidades de Cuidados Intensivos en los hospitales, así como contar con los tratamientos necesarios suficientes.
Igualmente la responsable sanitaria del Ejecutivo europeo ha pedido el desarrollo de sistemas integrados de vigilancia, que no estén basados exclusivamente en la identificación y notificación de todos los casos, sino también en la obtención de estimaciones fiables. En ese sentido, se muestra partidaria de continuar con pruebas a grupos específicos y la secuenciación de muestras que permitan precisar la circulación de nuevas variantes.
Por último, Kyriakides ha pedido la recuperación de los sistemas sanitarios nacionales y la evaluación del impacto de la pandemia, en lo referente a los retrasos en los tratamientos que se han sufrido en los diferentes países.