El ministro de economía británico, Jeremy Hunt, ha anunciado la aprobación de un plan para convertir el país en una potencia en el sector de las ciencias de la salud con un fondo de 749 millones de euros y mejoras regulatorias.
El gobierno de Reino Unido va a incrementar el presupuesto del Biobanco UK (con datos de más de medio millón de individuos para la investigación genética, ambiental y de factores de estilo de vida en el área de la salud), a aliviar la carga burocrática de las aprobaciones de ensayos clínicos (EECC) y a premiar con aportaciones económicas a los médicos de Atención Primaria que contribuyan a reclutar pacientes para los estudios. Estas medidas tienen un presupuesto asignado de 650 millones de libras (749 millones de euros), con los que se quiere reactivar la investigación en el país.
En una nota difundida por su departamento, Hunt ha dicho que “es una parte crucial de la oferta a las compañías del sector decir que no se limiten a realizar investigación aquí, sino que podrán realizar ensayos clínicos con pacientes, son los datos más valiosos de todos”.
A la zaga de los españoles
Según el rotativo ‘The Guardian’, la nueva política busca revertir “el colapso de los EECC comerciales en el Sistema Nacional de Salud, que se han visto afectados por un descenso del 44% en la participación de pacientes (de 50.000 en 2017 a solamente 28.000 en 2021”. De acuerdo con el periódico “Reino Unido está perdiendo terreno respecto a países como España, Polonia y Australia”.
Se va a facilitar a los médicos informar a sus pacientes sobre EECC en su zona mediante la aplicación del SNS, además de simplificar la autorización de ensayos clínicos.
Los últimos datos oficiales muestran que el regulador (MHRA) tarda aproximadamente 110 días en dar luz verde al inicio de ensayos clínicos en el país. Es el doble de lo que tardaba el año pasado. El objetivo es reducirlo a 60 días.
El paquete de medidas, denominado ‘Life Sci for Growth’ (algo así como ‘Ciencias de la Vida para el Progreso’) incluye diez medidas en total. Se asignan 121 millones de libras para impulsar ensayos clínicos, 48 más a innovaciones que faciliten la preparación para cualquier emergencia sanitaria futura, 154 millones son para aumentar la capacidad del biobanco y 250 millones para incentivar a empresas de ciencia y tecnología.
El sector de ciencias de la vida es uno de los más prósperos del país, con un valor estimado en 94.000 millones para la economía nacional (cifra de 2021), un 9% más que en el periodo anterior.
“La industria da trabajo a más de 280.000 personas, aporta 94.000 millones a la economía nacional cada año y fue la que produjo la primera vacuna covid del mundo”, ha dicho Hunt.
El anuncio del plan se hizo en presencia de ejecutivos de la industria, reunidos con representantes del ministerio.
Como parte del plan de apoyo a los EECC se facilitará su agilización y el acceso a datos en práctica clínica (RWE) a través de un conjunto de redes de nueva creación denominadas ‘Clinical Trial Acceleration Networks’.
“El gobierno ha escuchado a la industria”
Steve Bates, director de la Asociación de Bioempresas británica ha declarado con motivo del anuncio que el plan ayudará a afrontar algunos de los retos fundamentales que las compañías del sector (“grandes y pequeñas”) se encuentran cuando considera invertir y crecer en Reino Unido.
Richard Torbett, presidente de la Asociación de la Industria Farmacéutica Británica (ABPI), ha dicho que el plan muestra que “el gobierno reconoce la enorme oportunidad que supone para el Reino Unido desencadenar el potencial económico de la industria de las ciencias de la vida. “Estas medidas demuestran que el gobierno ha escuchado a la industria y ayudará al país a recorrer la senda que conduce a su visión de la industria”, ha dicho.
Nicolas Gonzalez Casares: