La gran mayoría de los españoles consideran necesario que el uso de la Inteligencia Artificial (IA) dentro del ámbito de la salud tiene que tener una regulación específica. As lo señala la primera ola de Barómetro Sanitario que este miércoles ha publicado el Ministerio de Sanidad y en el que se recogen algunas de las valoraciones que los españoles realizan sobre el sistema sanitario-
En esta última oleada, realizada el pasado mes de abril, sobre 2.452 entrevistas, los aspectos relacionados con la tecnología y el manejo que de ella hacen los usuarios del sistema sanitario ha tenido una especial relevancia. Entre estos aspectos el uso de la IA arroja luces y sombras; aunque una escasa mayoría, el 53,4% ha oído hablar de su aplicación, la mayoría de los ciudadanos se muestra favorable a que se informe al paciente sobre su uso (85,5%). Igualmente, un 77,5% considera que el usuario tiene que tener medios para que sus datos sean utilizados.
También dentro del ámbito tecnológico, pero más cercano al ámbito de la farmacia, el sistema de receta electrónica interoperable del SNS es conocido por el 66,2%
de la población, pero solo un 20,3% ha utilizado esta funcionalidad. Ambas cifras suponen un leve crecimiento sobre las oleadas anteriores.
En cuanto al uso de la historia clínica electrónica un 32,7% de la población ha accedido a su historia clínica en la sanidad pública, mientras que un 34,4% desconoce esta posibilidad y un 20,6% no dispone o no sabe utilizar los medios digitales. El 49,7% de la ciudadanía utiliza algún certificado electrónico para trámites administrativos. Además, el 43,2% sabe que su historial clínico puede ser consultado por profesionales sanitarios de otras comunidades autónomas en caso de necesitar asistencia sanitaria.
Satisfacción medida
Por otro lado, la valoración general del funcionamiento del sistema sanitario público que hacen los españoles se mantiene en similares niveles a las oleadas anteriores. Un 53,9% de la población considera que el sistema funciona bien o bastante bien, mientras que un 45,1% opina que necesita cambios importantes o profundos.
Desde el Ministerio de Sanidad, no obstante, se indica también que ese nivel de satisfacción tiene matices: “Cuando se analiza la opinión de las personas que han utilizado los servicios
En los últimos 12 meses, la percepción mejora significativamente”. Así la encuesta, que realiza periódicamente el Centro Investigaciones Sociológicas, “más del 80% de las personas usuarias valoran positivamente la atención recibida, lo que refuerza la confianza en el sistema desde la experiencia directa”.
Los servicios de urgencias del 061/112 (7,34 puntos) y la atención hospitalaria a pacientes ingresados (7,10) encabezan la lista de los mejor valorados. Les siguen la atención primaria y las consultas de atención hospitalaria, aunque en estas últimas se percibe una menor satisfacción.
Un 80,7% de la población ha acudido al médico de atención primaria pública en los últimos 12 meses, y un 44,7% ha sido atendida por un especialista del ámbito hospitalario. En ambos niveles asistenciales, más del 80% de las personas usuarias valoran positivamente la atención recibida, destacando la confianza y seguridad que transmite el personal sanitario. En hospitalización, el 9,9% de la población ha sufrido algún ingreso en el último año, y un 81,4% valora positivamente su experiencia. En urgencias, utilizadas por el 48,4% de los encuestados, el grado de satisfacción alcanza el 72,8%.
El 20,6% de la población ha requerido atención sanitaria por motivos de salud mental en el último año. De ellos, el 52% acudió a la sanidad pública, el 11,6% a través de seguros privados y un 30,3% mediante pago directo.
En el ámbito público, la atención fue prestada sobre todo por psiquiatras (38,6%), médicos de familia (37,5%) y psicólogos (16,6%). El 60,5% se muestra satisfecho con la atención recibida y el 85,1% afirma que fue igual o mejor de lo esperado, aunque un 24,3% refiere que su situación no mejoró.
Pruebas diagnósticas
El Barómetro explora por primera vez el acceso a determinadas pruebas diagnósticas ante un problema de salud nuevo. El 23,1% de la población refiere haberse tenido que realizar una ecografía, el 16% un TAC, el 15,2% una resonancia y el 4,8% una colonoscopia en el último año.
Los tiempos de espera varían significativamente: un 54,9% de las ecografías y un 55,5% de los TAC se realizaron en menos de un mes desde su indicación, mientras que el porcentaje baja al 40,1% en las colonoscopias. Esta última prueba, según manifiestan las personas entrevistadas, registra el mayor tiempo medio de espera (113 días), frente a los 37 días de media de la resonancia.