El 56,7% de los española considera que el Sistema Nacional de Salud funciona bien o bastante bien. Así lo señala el Barómetro Sanitario correspondiente al año 2023, elaborado por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) y que el Ministerio de Sanidad ha hecho público este miércoles. Esta cifra se muestra levemente inferior a la registrada el pasado año (57,1%) y sigue muy lejana con respecto a la de 2019, la última referencia anterior a la pademia, cuando casi 3 de cada 4 españoles opinaban que el sistema funcionaba bien o muy bien (el 71,4%).
La ‘nota’ global que los españoles ponen al sistema sanitario es de 6,2 este pasado año; casi medio punto menos que en 20219 (6,75) y un tercio de los encuestados piensan que este año el problema de las lista de espera ha empeorada y el 43,5% que se mantiene igual. Solo uno de cada diez españoles piensan que esta cuestión ha mejorado en 2023.
Los servicios mejor valorados siguen siendo lo de Urgencias y la asistencia en los hospitales públicos (7,42 y 7,23 sobre 10, respectivamente), mientras que la atención primaria se queda más lejos con un 6,3 en el caso de las consultas y la misma nota para los servicios de urgencia de AP.
Atención Primaria
En esta edición, el Barómetro Sanitario se interesa por cómo sienten los ciudadanos que les está afectando la situación de los centros de Atención Primaria que se refleja en la opinión pública. El 22,1% refiere que les está afectando mucho o bastante, frente al 21,9% que piensa que algo y el 53% que refiere que nada o casi nada.
Respecto a la necesidad de aplicar determinadas medidas en el ámbito de la Atención Primaria, se señalan como las más importantes que las personas mantengan al mismo/a médico/a de familia de forma estable si están satisfechas (9,2); aumentar las plantillas de personal sanitario (9,1); y dedicar más recursos económicos (9). Otras medidas, como aumentar el tiempo de consultas o mejorar las instalaciones y medios tecnológicos, se sitúan en torno a 8 puntos.
Respecto a la valoración de las personas que han hecho uso efectivo de los servicios del Sistema Nacional de Salud en los 12 meses previos y que, por lo tanto, tienen experiencia de uso de los mismos, el Barómetro muestra, en general, “una buena opinión sobre la atención recibida”, informa el Ministerio de Sanidad.
En AP un 21,1% de los pacientes fueron atendidos en el día o al día siguiente. El 69,8% refirió que pasó más de un día porque no había cita antes, mientras que para un 5,3% pasó más de un día porque le interesaba o le venía mejor.
Las personas que tuvieron que esperar más de un día porque no había cita disponible, tuvieron una demora media de 9,12 días para ser vistos. El 81,4% de las personas que han utilizado los servicios de Atención Primaria manifiestan estar satisfechas con la atención recibida, aumentando ligeramente respecto a 2022 (79,7%).
Los aspectos mejor valorados son la confianza y seguridad que les merecen los profesionales de enfermería (8 puntos) y medicina (7,8 puntos), seguidos del conocimiento y seguimiento de sus problemas de salud y de la información recibida (en torno a 7,5 puntos en ambos). El tiempo dedicado por el/la médico/a se valora con 6,8 puntos.
Atención especializada
El 47,8% de las personas entrevistadas refiere haber consultado un especialista del segundo nivel asistencial de la sanidad pública en los últimos 12 meses y el 82,8% valora positivamente la atención recibida.
Un 42,3% acudió a estas consultas por indicación del médico de Atención Primaria y el 55,4% por citación del propio médico/a especialista tras una consulta anterior.
El 38,2% de las personas remitidas desde Atención Primaria refirieron tiempos de espera de más de 3 meses, sin cambios relevantes respecto a 2022. Los aspectos mejor valorados son la confianza y seguridad que trasmite el/la especialista (7,8) y la información recibida sobre su problema de salud (7,7). El tiempo dedicado por el/la médico/a cada persona se valora con 7,2 puntos.
Atención Hospitalaria
El 9,1% de las personas entrevistadas refiere haber estado ingresado en un hospital público en los últimos 12 meses. El 40,9% de los pacientes lo hizo de manera programada para una cirugía o prueba diagnóstica; el 54,1% ingresó por una enfermedad o problema de salud; y el 4,5% por un parto.
El 89,6% de los pacientes valora positivamente la atención recibida (buena o/y muy buena) durante su ingreso en un hospital público. Los aspectos mejor valorados son los cuidados de los diferentes profesionales (enfermería 8,5 puntos y medicina 8,4 puntos). El aspecto menos valorado (7,2 puntos) es el número de personas que comparten habitación, que aun así se sitúa en una puntuación positiva.
Urgencias
El 39% de las personas entrevistadas refiere haber acudido a un servicio de urgencias de la sanidad pública en el último año. Las personas usuarias de los servicios de urgencias declaran un patrón medio de frecuentación de 2,7 veces al año. Un 12% manifiesta haber acudido 5 o más veces en este periodo.
Los dispositivos de urgencia de la Atención Primaria recibieron aproximadamente el 44,4% de la demanda de atención urgente. Los servicios de urgencia hospitalarios recogieron el 49,7% de la demanda, tanto espontánea como derivada desde otros dispositivos asistenciales, y el 4,7% acudió a un servicio de urgencias 112 / 061
Para la mitad de los pacientes (47%) el tiempo de permanencia en la urgencia fue entre 1 y 4 horas; para un 26,1% el tiempo fue inferior a 1 hora, mientras que el 2,4% permaneció en el servicio de urgencias 24 horas o más.
Receta digital del SNS
El 56,9% de las personas saben que pueden consultar la historia clínica electrónica de su servicio autonómico de salud y el 34,8% accede a la misma. Un 13,6% manifiesta que no sabe o no puede utilizar Internet.
El 63% desconoce que los médicos de otra comunidad autónoma pueden consultar electrónicamente sus informes clínicos si tuvieran que prestarles asistencia sanitaria y que cada persona puede, igualmente, consultar sus informes clínicos interoperables que existan en el conjunto del Sistema Nacional de Salud
A su vez, un 25% de la población manifiesta haber hecho uso del servicio de interoperabilidad del SNS de receta electrónica, que permite obtener los medicamentos en cualquier farmacia del país.