La farmacia se ha visto decepcionada por el escaso papel que tienen estos establecimientos en el borrador de la Estrategia de Atención Integral Sociosanitaria que el Ministerio de Sanidad ha remitido a las comunidades autónomas y que se debatirá en el próximo Pleno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud.
Tal y como explica el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid (COFM) en su publicación Farmadrid, "la futura estrategia sociosanitaria se olvida de la farmacia", según indican, sólo se recurre al sector como una posibilidad para potenciar la atención farmacéutica en los entornos residenciales. Y eso no es suficiente para potenciar el papel de la farmacia en el ámbito sociosanitario y la atención a pacientes domiciliarios.
El documento apenas menciona el papel de los farmacéuticos a la hora de garantizar, por ejemplo, la continuidad de los cuidados de los pacientes crónicos dentro del equipo multidisciplinar de profesionales, uno de los objetivos de la estrategia y sólo se recurre a las oficinas de farmacia como una posibilidad más que las administraciones sanitarias y sociales competentes deben tener en cuenta, junto con las redes de cuidados informales como asociaciones de pacientes, a la hora de coordinar los recursos sociales y sanitarios existentes y potenciar la atención clínica y farmacéutica en los entornos residenciales.
A la vista de este documento, la farmacia se ha decepcionado mucho. Y más tras haber escuchado las palabras del ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, que en la toma de posesión de Jesús Aguilar como presidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos, anunció que el papel de la farmacia sería importante en esta estrategia sociosanitaria.