Regulación y estratificación de los pacientes, claves en el futuro de la telemedicina y la telefarmacia

La Sociedad Española de Directivos de la Salud (Sedisa) ha organizado un encuentro, titulado 'Reorganización de los hospitales: telemedicina y telefarmacia en el post Covid-19', en el que se habló de la necesidad de regular ambas prácticas e incluirlas en los objetivos de los contratos programa y en el modelo asistencial, para que el acceso a ambas tenga lugar en términos de equidad y para ofrecer seguridad jurídica a profesionales sanitarios y pacientes.

De cara a su consolidación en la práctica asistencial, Candela Calle, directora gerente del Institut Català d'Oncología (ICO), opinó que "el primer paso es analizar qué se puede hacer y qué no se puede hacer, como la gestión de las emociones, a través de ambas". Informó de que, durante la pandemia, el ICO ha prestado teleasistencia a los pacientes oncológicos en un 80% de los casos, y un 20% presencial. Ahora, esos porcentajes habrían pasado a ser del 50-50%. Calle indicó que, además de invertir en tecnología, hay que apostar también por "la formación de profesionales y pacientes" para esta nueva forma de relacionarse. La tecnología también puede servir, dijo, "para coordinar niveles asistenciales".

En el encuentro también intervino Teresa Requena, directora Médica del Hospital Universitario Severo Ochoa de Leganés, quien se refirió a las revisiones sistemáticas presenciales en pacientes crónicos, las cuales, dijo, "suponen un colapso en las agendas de las consultas externas, que se podrían agilizar estudiando cuáles de ellas podrían realizarse a través de la telemedicina y la telefarmacia". No obstante, admitió algunas resistencias, tanto por parte de algunos profesionales sanitarios como de los pacientes, ahora que parece haber pasado la peor fase de la pandemia. "Mientras que durante la pandemia los pacientes lo valoraron mucho porque se sentían atendidos en una situación de crisis sanitaria, en la actualidad, muchos prefieren volver a la asistencia física", señaló, y defendió la necesidad de que haya "un proceso de adaptación" a las nuevas herramientas.

Rafael López, jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital Universitario de Santiago de Compostela, llamó a ir más allá de las meras llamadas telefónicas y abogó por “un plan estratégico de incorporación de tecnologías al sistema", que incluya "la monitorización, el seguimiento y las recomendaciones e instrucciones médicas".

En relación con la telefarmacia, cabría destacar la intervención de Miguel Ángel Calleja, jefe del Servicio de Farmacia Hospitalaria del Hospital Universitario Virgen Macarena de Sevilla, quien defendió igualmente que este modelo de atención debe ir más allá de la mera entrega de los medicamentos en el domicilio de los pacientes e "incorporar también otras acciones, como la revisión del tratamiento, la monitorización y la adherencia al mismo por parte de los pacientes".

"La primera consulta tras la prescripción de un medicamento nuevo debe ser presencial, pero las siguientes, a modo de revisión, pueden ser telemáticas. Además, no se puede seleccionar a los pacientes por el medicamento ni por la patología, sino por las características individuales, priorizando pacientes que deben realizar desplazamientos largos y aquellos que no pueden desplazarse y, en su lugar, acude su cuidador a por los medicamentos", aseveró.

Pedro Jaén, jefe del Servicio de Dermatología del Hospital Universitario Ramón y Cajal de Madrid, se refirió a la teleconsulta dermatológica y opinó que "al estar basada en imagen clínica y dermatoscópica" se trata de una especialidad "idónea para la telemedicina, tanto en el diagnóstico como en el tratamiento y el seguimiento". En su opinión, "el hecho de que las imágenes puedan viajar, mejora la efectividad de la asistencia sanitaria y la eficiencia en el uso de los recursos".

Actualmente, en España se estarían llevando a cabo cada año 7,5 millones de consultas dermatológicas, un tercio de ellas en la sanidad privada y dos tercios en la pública. Solo el 2-3% de ellas se hacen telemáticamente, según Jaén, que aboga por "disminuir la desigualdad territorial entre comunidades autónomas en el acceso a la misma".