La falta de información sobre un medicamento, especialmente cuando este es nuevo, es la principal causa de heterogeneidad en su uso. Así lo explicaron los expertos que participaron en la mesa “Enfoque de la Esclerosis Múltiple en diferentes comunidades autónomas, modelos asistenciales y de financiación” que tuvo lugar en las V Jornadas de Excelencia en Farmacia Hospitalaria organizadas por la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH) y la Fundación Salud 2000. Una jornada que trató de darle "un giro de 360º a la Esclerosis Múltiple".
Los presentes se preguntaron si debería homogeneizarse el uso de los medicamentos. Todos coincidieron en que esa convergencia era importante, pero no siempre posible. De este modo, Encarnación Cruz, subdirectora de Compras de Farmacia de la Consejería de Sanidad de Madrid, quiso dejar claro que la dispersión que se produce es “cuando la evidencia científica no es sólida”, por lo que hay campo para la variabilidad. Por el contrario, “donde hay datos contundentes hay poca variabilidad”, remarcó. Por ello, para esta experta niega que las recomendaciones que se hagan desde las autonomías sea de “forma aleatoria”. Se hacen en función de la evidencia y aunque pueden no ser iguales, “es un mito que sean muy diferentes, en realidad son parecidas”.
En el lado contrario se situó Xavier Montalbán, director de la Unidad de Neuroinmunología clínica del Hospital Vall d’Hebrón, que aseguró que “la heterogeneidad es tremenda”. En este sentido, destacó que desde lo que aprueba la Agencia Europea del Medicamento (EMA) y que traslada la Agencia Española de Medicamentos a lo que luego se observa en el Informe de Posicionamiento Terapéutico (IPT), luego en la CCAA y en el hospital, se van reduciendo los pacientes a tratar, por lo que “hay mucha heterogenicidad” porque en cada una el filtro se ha hecho de forma diferente.
A medio camino entre los dos se situó el director de Asistencia Sanitaria de Osakidetza, Antonio Arraiza, quien indicó que entre comunidades autónomas más o menos hay homogeneidad, pero “el trabajo a hacer es también en la homogeneidad dentro de las autonomías”. En cualquier caso, el objetivo es claro, tal y como explicó el director de Asistencia Sanitaria del Servicio Gallego de Salud (Sergas), Ramón Ares: “Hay que homogeneizar lo más posible y que los pacientes tengan acceso por igual” a los tratamientos.
Habida cuenta de que la principal traba para la homogenización es la falta de información, Olga Delgado, jefe del Servicio de Farmacia del Hospital Universitario de Son Espases, reclamó a la industria más datos. “Hay que exigir a las compañías datos comparados” en sus dosieres de solicitud de autorización.
Por otro lado, Delgado criticó que los IPT no hayan conseguido la homogenización que pretendían procurar. De este modo, mientras que solo hay algunos informes que han definido claramente el posicionamiento, según esta farmacéutica, “no es lo normal”. Tal y como explicó, “lo habitual es que el IPT deje margen a la evaluación posterior, con lo que el IPT no homogeneiza” sino que obliga a evaluar en las comunidades autónomas entre otras cosas en función del coste de adquisición del fármaco que, como también destacó, además de no ser igual para todos los hospitales, “es secreto”.