Según el barómetro EsCrónicos 2016, los enfermos crónicos coinciden en que el principal cambio que se debe llevar a cavo es el de terminar con la desigualdad asistencial entre comunidades autónomas. Este barómetro se ha realizado con el auspicio de 30 organizaciones de pacientes a nivel estatal y estos han calificado la atención sanitaria con un 6,1, cifra superior a la de años anteriores.
Aunque la calidad de la atención ha recibido una calificación más alta, cada vez aumenta más el número de pacientes crónicos que consideran necesarios cambios en el Sistema Nacional de Salud, pues de cada 10 son 9 los que quieren cambios. Un dato a favor es el 77% de los pacientes considera adecuado el tratamiento que ha recibido para su enfermedad crónica.
Un paciente asociado
De la encuesta, para la que se han analizado 2.335 entrevistas, se desprende que aquellos pacientes que forman parte de una asociación tienen un mejor resultado en su salud y consumen un número menor de medicamentos que aquel que no pertenece a ninguna.
"Las organizaciones de pacientes consideramos esencial que el nuevo Gobierno nos integre en las decisiones de política sanitaria y ponga punto y final a las diferencias en la atención según la región. Tenemos un único SNS y no 17, aunque estén gestionados por distintas administraciones" ha asegurado Tony Gimón, vicepresidenta de la Federación Española de Cáncer de Mama (Fecma).
Una serie de cambios por la administración
También en el Barómetro Sanitario 2015 del Ministerio de Sanidad ha coincidido en que las demoras son el principal cambio por el que debe apostar la sanidad y no solo eso, también el que sean cada vez más parecidas las atenciones que se prestan a los pacientes en las Comunidades Autónomas.
En esta línea, el 63,7% de la población general manifestaba en 2015 que el sistema sanitario en España funciona “bien” o “bastante bien aunque necesite algunos cambios”, mientras que un 29,3% opinaba que necesita cambios fundamentales. En el colectivo de pacientes crónicos estas cifras eran más críticas: el 86% consideraba que funciona bien o muy bien pero necesita cambios y el 40% opinaba que estos cambios debían ser importantes.