El Parlamento de Cataluña ha aprobado hoy, con 78 votos a favor, 34 en contra y 15 abstenciones, la enmienda a la totalidad a la proposición de ley presentada por Ciudadanos sobre la farmacia asistencial. De este modo, la propuesta no iniciará su tramitación parlamentaria al ser bloqueada por los grupos parlamentarios de la cámara.
La iniciativa buscaba que la oficina de farmacia pudiera acceder a parte de los datos del historial farmacoterapéutico de los pacientes, y también contemplaba que el farmacéutico pudiera completar la información. Para David Mejía, el diputado de C's que ha defendido la propuesta y portavoz sobre temas de farmacia, se ha perdido la oportunidad de mejorar la atención al paciente a través de una medida que aportaría eficiencia al sistema mediante una mayor coordinación entre profesionales y niveles asistenciales.
Mejía ha lamentado que el hemiciclo haya “infravalorado” el papel del farmacéutico y no haya tenido en cuenta que la iniciativa contaba con el consenso de sociedades científicas, colegios de farmacéuticos, empresarial de farmacias y representantes de los pacientes.
No a través de una ley
Uno de los motivos por los que las distintas formaciones han rechazado la propuesta es que consideran que una ley no es la vía adecuada para su desarrollo, como así lo han afirmado el diputado del grupo parlamentario socialista, Raúl Moreno, y el de Sí que es Pot, Albano Dante Fachin. Para Moreno, la necesidad planteada por C’s no puede abordarse de manera puntual, y el establecimiento de mecanismos de coordinación entre profesionales debe pasar por un proyecto más integral, en vez de por leyes aisladas.
El diputado de Sí que es Pot coincide con el socialista al afirmar que los cambios deben proponerse teniendo en cuenta al resto del sistema y requieren de un debate más a fondo, especialmente sobre el hecho de compartir datos sanitarios.
Este mismo argumento es compartido por Montse Fornell, del grupo parlamentario Junts pel Sí, que presentó la enmienda a la totalidad, junto con la Candidatura de Unidad Popular- Llamada Constituyente. Aunque Fornell reconoce que hay puntos de conexión con la propuesta realizada, y que su grupo “no cierra la puerta a nada”, considera que existen dificultades operativas en el acceso al historial farmacoterapéutico y en la complementación de información, dada la diversidad de soportes electrónicos. También cree que sería complejo el registro del consentimiento del usuario y la garantía de la confidencialidad de sus datos.
Ya hay acciones en marcha
Otro razonamiento en contra de la propuesta expuesto por esta diputada es que el Departamento de Salud de Cataluña ya está trabajando en alcanzar los objetivos de la propuesta de Ciudadanos. Como muestra de ello, ha destacado los avances en la receta electrónica, la herramienta que debe permitir que los profesionales compartan más información sobre la medicación que toma el paciente, que está previsto que incluya la medicación hospitalaria de dispensación ambulatoria y que ofrezca más seguridad clínica de los medicamentos.
Otra iniciativa que para esta diputada de Junts pel Sí cubriría en parte los objetivos buscados por la proposición de ley, al facilitar la cooperación entre profesionales y el acceso a información clínica relevante, es el proyecto “La Meva Salut”, un espacio digital personal de consulta que permite a los ciudadanos disponer de su información sobre salud.
Servicios como modo de supervivencia
La diputada de Candidatura de Unidad Popular- Llamada Constituyente, Eulalia Reguant, ha introducido en el debate el tema del modelo de oficina de farmacia y la situación actual del sector, que, a consecuencia de las medidas de control del gasto y de la crisis, ha visto la necesidad de potenciar su cartera de servicios “para garantizar la supervivencia de su negocio”. En su opinión, la Atención Farmacéutica “no acaba de cuajar” entre otros motivos porque solo pueden desarrollarla farmacias con recursos económicos y humanos y bien situadas, aparte de que esta actividad despierta recelos entre los médicos.
Para Reguant, habría que abordar el modelo sanitario en su conjunto: “La proposición de ley va en la línea de gestionar las migajas porque no tiene en cuenta que el modelo ha sufrido recortes y no analiza si el modelo que tenemos es el que necesitamos”, apunta. A su parecer, si la Atención Primaria no viviera en la actual precariedad, se solucionarían muchos de los problemas a los que pretende dar respuesta la proposición de C's. Además, opina que ésta no concreta a qué parte de la historia clínica habría que acceder ni bajo qué criterios.
Grupo Popular, a favor
El único grupo parlamentario en dar apoyo a la iniciativa ha sido el Popular. Santiago Rodríguez argumenta que el papel de la farmacia ha de ir más allá de la dispensación de medicamentos y que en esta línea iba la proposición de ley. En su opinión, no se trata de que los farmacéuticos sustituyan a los médicos, sino que se dé una colaboración entre ellos en beneficio del paciente, y la iniciativa de C's “no es la solución, pero sí una parte necesaria de la misma”.
David Mejía, por su parte, ha defendido que los pacientes, a través de su farmacia, puedan tener más conocimiento sobre su salud y aprovechar la proximidad y la profesionalidad que le ofrece su farmacéutico. “¿Ustedes encuentran normal que en el siglo XXI todavía haya gente mayor que va a la farmacia a tomarse la tensión y tenga que ir a la consulta de su médico de primaria con el papelito?”, ha preguntado.
Este diputado ha insistido en que la iniciativa sería útil en casos de alergias e intolerancias, y ha asegurado que “es muy difícil para los farmacéuticos hacer un buen seguimiento de los pacientes polimedicados que consulten síntomas menores”. Por eso, ha recordado que, en otros países, como Canadá o Australia, es un sistema de éxito que funciona: “No nos quedemos atrás; podemos ser pioneros en el conjunto del país”. “No cierren las puertas a abrir un futuro mejor para la sanidad y a evolucionar en beneficio de la calidad de vida de los catalanes”, ha pedido a los miembros de la Generalitat.