La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha reclamado al Gobierno que “defina un comité asesor independiente que ayude a establecer qué se financia, y se hagan públicos los precios reales que se pagan por los medicamentos”.
La asociación considera que hay una “tendencia de subida de los precios, constante e injustificada que debería controlarse por el bien del paciente” y, por ello, solicita “medidas de transparencia y rendición de cuentas”.
Tal y como ha explicado en un comunicado, el incremento del gasto hospitalario, que ha estimado en un 21% desde 2014, debido principalmente a los tratamientos para la hepatitis C, “puede convertirse en un grave problema económico”. Según la OCU esto sucede por dos razones: “Primero porque se limita la capacidad de ofrecer sin restricciones los tratamientos más adecuados para cada paciente, y porque obliga a hacer reajustes presupuestarios reduciendo los recursos destinados a otras partidas igualmente necesarias”. El resultado según esta organización es “un deterioro de la calidad asistencial”.
Según dicen, fijar un techo de gasto de forma centralizada “no basta para que los medicamentos y productos sanitarios de alto impacto económico bajen sus precios hasta niveles asequibles”. De acuerdo a lo que indican, aunque ya se han probado algunas fórmulas de contención del gasto y que mejoran la transparencia, como centralizar las compras o realizar subastas públicas, “no se aplican siempre ni en todo el territorio español”.
De este modo, además del comité asesor independiente y la transparencia en precios, la OCU cree que hay que modificar la legislación del sistema de patentes, “que otorgan el control durante años a los fabricantes cada vez que lanzan un nuevo fármaco al mercado”.
