El Centro Europeo para el Control y la Prevención de Enfermedades (ECDC) asegura que los países europeos deben “aumentar su nivel de vigilancia” ante las variantes de las nuevas cepas detectadas en Gran Bretaña y Suráfrica.
El ECDC ha publicado hoy el informe para instar a todos los estados miembros, que el riesgo de transmisión comunitaria de estas cepas “es muy alto” debido a su “mayor transmisibilidad”.
“Los Estados miembro deben preparar el sistema sanitario para una alta demanda”, asegura este organismo, dependiente de la Unión Europea y radicado en Noruega. Igualmente ha indicado que “los países deben preparar a los laboratorios para una mayor demanda de pruebas de detección”, ya que estás nuevas variantes “se contagian con mayor rapidez”.
Igualmente, el ECDC ha lanzado un aviso sobre la no realización de viajes no esenciales y propone el refuerzo de las restricciones para realizar más rastreos.
“El aumento de nuevas infecciones provocará el incremento de las tasas de hospitalización y de mortalidad en todos los grupos de edad”, asegura. Para frenarlo, afirman, “se necesita una combinación de medidas, como el distanciamiento social, el aumento del nivel de vigilancia, la secuenciación de muestras y el rastreo riguroso”.