La respuesta integral a la pandemia de la covid-19 ha incluido soluciones que han pasado por restricciones, productos farmacéuticos y tecnología sanitaria. Dentro de los planes nacionales de vacunación contra la covid-19, varios países europeos han recomendado el uso de pruebas serológicas para el seguimiento de la pandemia y apoyar políticas de inmunización.
Con el objetivo de abordar cuestiones clave, como si se deben considerar los datos de los test serológicos como parte de la evidencia epidemiológica para la priorización y determinación de los grupos objetivo de vacunación; si es suficiente la información acerca del papel de las respuestas inmunitarias humoral y celular en la protección contra el SARS-CoV-2 y si se han realizado los estudios necesarios para evaluar la preexposición o el nivel de inmunidad a la enfermedad covid-19, Diariofarma ha reunido a un nutrido grupo multidisciplinar de expertos que han analizado y profundizado en todas estas cuestiones, destacando el papel que puede tener la determinación cuantitativa de los anticuerpos en la respuesta integral que, desde el ámbito sanitario, se puede dar contra la covid-19.
El encuentro ha contado con la participación del jefe del Servicio de Microbiología Hospital Universitario Ramón y Cajal, Rafael Cantón, el presidente de la Sociedad Española de Inmunología (SEI), Marcos López, el presidente de la Asociación Española de Vacunología (AEV), Amós García Rojas, el catedrático de Medicina Preventiva de la Universidad Rey Juan Carlos, Ángel Gil, el subdirector general de Prevención, Promoción de la Salud y Adicciones de la región de Murcia, Jaime Jesús Pérez Martín y el tesorero de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG), Lorenzo Armenteros, y ha sido moderado por el director de Diariofarma, José María López Alemany.
El coloquio, que ha contado con el patrocinio de Abbott, comenzó poniendo sobre la mesa el papel que han tenido hasta el momento las pruebas de anticuerpos para el SARS-CoV2 con determinación cuantitativa. En esta cuestión, Rafael Cantón señaló que los test de anticuerpos con determinación cuantitativa se incorporaron a la lucha frente a la pandemia a partir del verano de 2020. Pese al tiempo transcurrido, este microbiólogo resaltó que “probablemente, todavía se tienen que exprimir estas técnicas ya que no han sido utilizadas de forma amplia”.
Por su parte, Ángel Gil apuntó que la realización de estos test ha facilitado una información “relevante y clave”, como por ejemplo su papel en las encuestas de seroprevalencia que han informado sobre la inmunidad natural que se iba alcanzando en la población. Esta información, según este experto, “nos daba una idea de la magnitud de la enfermedad en el conjunto de la población”. No obstante, para el catedrático de Medicina Preventiva, “queda mucho por decir y por hacer” y, lo tendremos que “hacer, incluso después de la vacunación”. Por ello, Gil recalcó que “de cara a un futuro”, se podrá utilizar para la revacunación y futuros planes de vacunación”. En este campo “la información del nivel de anticuerpos será muy relevante”, aseguró.
En sintonía con los compañeros de debate, el presidente de la SEI señaló que la determinación de anticuerpos ha sido “una parte esencial” y ha sido “clave en aquellos meses en los que no se contaba con tanta información ni herramientas moleculares para poder diagnosticar la infección activa”. Para Marcos López, en una etapa posterior están siendo fundamentales para los estudios de seroprevalencia y para determinar el nivel de inmunidad de la población.
Amós García Rojas: “Los test de anticuerpos son un instrumento clave para evaluar la duración de la respuesta protectora de la vacuna y será un instrumento tremendamente operativo para las políticas vacunales para establecer estrategias de priorización” | “Estas pruebas que nos enseñan cómo debemos trabajar en un futuro”
Marcos López: “Considero que los anticuerpos han sido parte esencial en el manejo de la enfermedad tanto para el diagnóstico como para el manejo” | “Hay gente que tras vacunarse no tienen anticuerpos, pero se debe saber que hay diferencia entre los anticuerpos N o S, de infección natural o tras vacunación”
Por su parte, el subdirector general de Prevención, Promoción de la Salud y Adicciones de la región de Murcia, explicó que, pese a su utilidad e importancia, ha habido mucha información al respecto de los mismos que ha llegado a producir “confusión a la población” respecto al papel de los anticuerpos y su presencia en el organismo. No obstante, Jaime Pérez manifestó que “sí que es cierto que han tenido un papel importante y que lo siguen teniendo”.
Otra visión diferente respecto a esta cuestión fue aportada por Armenteros. Según dijo, como médico de Atención Primaria (AP), la utilización de estos test en la fase inicial parecía más un “interés más político que epidemiológico”, utilizando a la AP en un momento “bastante duro de presión asistencial” lo que conllevo “a dudar sobre el sentido que tenía realizar esos estudios a veces duplicados, a nivel autonómico y por otro lado a nivel estatal. No obstante, apuntó que, una vez pasada esta fase inicial, actualmente “los estudios de seroprevalencia y la determinación de anticuerpos cuantitativos tienen un valor importante en el seguimiento de la enfermedad”.
En este aspecto, Armenteros señaló que, pese a la desaparición de los anticuerpos en algunos pacientes, “contar con el conocimiento de haber pasado la enfermedad, conocer el nivel de afectación y saber cómo se ha defendido la persona, da un valor en el ámbito de la AP”, que no cuenta con herramientas que se pueden encontrar en el medio hospitalario.
En la misma línea el presidente de la AEV, Amós García-Rojas destacó que “conocer los anticuerpos ha tenido un papel importante, lo tiene actualmente y lo seguirá teniendo, indudablemente, en un futuro”. Según dijo, el problema es determinar cuál es su papel, resaltó. En este sentido, García Rojas indicó que, “a pesar de que trasladar a la ciudadanía el valor de este tipo de prueba ha contado con inconvenientes, y no se ha transmitido de forma clara su valor, son un elemento importante que nos enseña cómo debemos trabajar en un futuro”.
El valor de la serología para un mejor conocimiento de la infección
En este contexto, los expertos pusieron sobre la mesa el papel y valor de la serología. Marcos López explicó que la serología ha sido desde el principio un indicador indirecto para conocer la evolución de la enfermedad. En este sentido, el presidente de la SEI indicó que desde su sociedad han realizado llamamientos a tener en cuenta la serología para la priorización de vacunas, especialmente para las personas que han pasado la enfermedad, por lo que se podía retrasar su inmunización, al menos, seis meses, y dar una única dosis que es la que funcionaría como booster. Pese a la idoneidad de la propuesta, desde la mesa se plantearon las dificultades logísticas que ello tendría, lo que, por otro lado, retrasaría el proceso de vacunación.
Rafael Cantón: “Probablemente, todavía se tienen que exprimir estas técnicas de determinación cuantitativa ya que no han sido utilizadas de forma amplia” | “En las personas mayores, por la inmunosenescencia, podría tener interés realizar una valoración de la serología sin tener que llegar a hacer estudios de inmunidad celular”
Ángel Gil: “La determinación de anticuerpos ha aportado una información relevante, como las encuestas de seroprevalencia, que han sido claves para informarnos de la magnitud de la enfermedad” | “Las encuestas de seroprevalencia en grupos poblacionales pueden servir para determinar si se deben vacunar con una o dos dosis”
En este sentido, Jaime Pérez explicó que incluir la utilización de test de serología para priorizar las pocas dosis disponibles de vacunas, “sería complicado” ya que nos encontramos ante un proceso de vacunación “masiva”, donde la logística “ya de por sí es complicada''. Además, por otro lado, apuntó que, dejando a un lado la población infectada en la primera ola, de la pandemia, respecto al resto de la población, está ya aparece diagnosticada, por lo que se podría realizar “un cruce de los registros” de los últimos seis meses y en su caso “valorar si procede la vacunación de esa persona”. García- Rojas también coincidió en que “sería tremendamente complejo desde un punto vista logístico, en la situación actual”. No obstante, según dijo, “en un futuro, su utilización dependerá de muchísimos factores, entre ellos, la capacidad de respuesta que logremos. Según dijo, es esencial no poner excesiva complejidad logística al modus operandi actual, afirmación que fue secundada por el resto de los participantes.
Por otro lado, el presidente de los inmunólogos explicó que “será muy importante conocer la serología y ver la evolución de los anticuerpos anti-proteína S para definir políticas de vacunación concretas en el futuro”. Más allá de las vacunas y pese a la importancia de los anticuerpos, Marcos López, también quiso dejar claro que la respuesta inmunitaria celular específica contra el SARS-CoV2 es también muy importante en la lucha contra la pandemia.
Los estudios de seroprevalencia, en las estrategias de vacunación
Angel Gil dejó claro que los estudios de seroprevalencia deben incluirse con las estrategias de vacunación. Según este experto, debe tenerse en cuenta especialmente debido a la escasez de vacunas y, por a ello, “es muy importante” la información de estos estudios y adoptarse una decisión clara sobre si la población que ha pasado la infección debe o no vacunarse y, en el caso de vacunarse, “la conveniencia de determinar si se realiza con una dosis o dos”. Desde su punto de vista, recalcó que sería conveniente tener en cuenta ese efecto booster que tienen las personas que han pasado la infección y que cuentan con anticuerpos. Según él, este dato, debe incorporarse claramente a las estrategias de vacunación, “de nada nos vale contar con los datos de una encuesta de seroprevalencia si no los incorporamos al día a día de lo que estamos haciendo con la vacunación”.
Para este experto, es esencial que “conforme vayamos alcanzando un cierto nivel de población vacunada, realizar determinaciones de anticuerpos frente a la proteína S”. Ya no sirven los anticuerpos que se buscaban antes, que eran para la proteína N, sino que es necesario buscar esa especificidad para conocer la protección de la vacuna, añadió.
Por su parte, García-Rojas destacó la posible relevancia de la confirmación de la producción de anticuerpos tras la vacunación en pacientes. El presidente de la AEV destacó que “en estos momentos, lo esencial es vacunar, vacunar y vacunar” y posteriormente, cuando se cuenta con alto porcentaje de población vacunada “los test de anticuerpos y los estudios de serología nos irán indicando por donde irá la respuesta protectora con la vacuna”. Por ello, para este experto “son un instrumento clave y tremendamente operativo para las políticas vacunales, con el objetivo de establecer estrategias de priorización en las vacunaciones y visualizar la duración de la respuesta protectora de la vacunación”, aseveró.
En la misma línea, Cantón además de avalar su uso en materia de vacunación, consideró que lo que aprendamos ahora con esas determinaciones en colectivos concretos pueda servir en un futuro para la lucha contra la pandemia.
Jaime Pérez: “Es cierto que los test de anticuerpos han tenido un papel importante y que lo siguen teniendo” | “Existen unos algoritmos de la estrategia de vigilancia de la ponencia de alertas, pero la aplicación práctica ha sido diferente por cada comunidad autónoma”
Lorenzo Armenteros: “Los estudios de seroprevalencia y la determinación de anticuerpos cuantitativos tienen un valor importante en el seguimiento de la enfermedad” | “Contar con el conocimiento de haber pasado la enfermedad, conocer el nivel de afectación y saber cómo se ha defendido la persona, da un valor en el ámbito de la AP”
Respecto al diferente uso que se ha dado de estos test a lo largo de la pandemia, Jaime Pérez explicó que existen unos algoritmos de la estrategia de vigilancia de la ponencia de alertas, pero cada comunidad autónoma ha actuado de forma diferente. Pese a ello, este experto consideró que “lógicamente” todas las comunidades deberían “tener un uso de las mismas de forma reglada tal y como marca la estrategia”.
El desarrollo de nuevas vacunas
Otro de los puntos que fueron tratados durante el encuentro fue la conveniencia de la utilización de un marcador subrogado que indicará la protección tras la vacunación de cara al desarrollo de nuevas vacunas y políticas de vacunación. En esta cuestión, Marcos López confirmó que “seguro que vamos a necesitar un marcador subrogado”. A este respecto, destacó que ya se ha utilizado la serología en el desarrollo de las vacunas actuales, además de la prevención de enfermedad. Pese a esto, el inmunólogo insistió en la importancia que tiene la respuesta celular para la inmunidad, “no se puede mirar solo una parte de la película”.
Y, respecto a la información que han aportado estas pruebas a nivel poblacional, Ángel Gil destacó la importancia de las encuestas de seroprevalencia, como ENE-Covid desarrollado por el Instituto de Salud Carlos III, las cuales han ido “dando un poco de idea de la inmunidad natural de la población”. Más allá del seguimiento de la pandemia, Gil explicó que se puede dar otra utilidad ahora a las serologías ya que, “en este momento, lo importante es definir el nivel de protección que están dando las vacunas a largo plazo y que es lo que se tendrá que cambiar”.
Los participantes también abordaron la oportunidad y conveniencia de la expedición del pasaporte vacunal europeo. Respecto a este tema todos ellos transmitieron de forma unánime sus dudas y escepticismo respecto a su utilidad y que sea realmente operativo. así como en relación con aspectos de ética y equidad.