El Grupo de Patología Infecciosa de la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (GPI de AEPap) y la Guía ABE se ha unido a la campaña dedicada a concienciar sobre el uso adecuado de antibióticos y la lucha contra las Resistencias a Antimicrobianos (RAM), resaltando que “el uso adecuado de antibióticos es una responsabilidad compartida que implica a autoridades, profesionales, población e industria farmacéutica”.
Según explican desde la sociedad científica y de acuerdo con datos del Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC), más de 35.000 personas mueren cada año en la Unión Europea y el Espacio Económico Europeo como consecuencia directa de una infección debida a bacterias resistentes a los antibióticos. Se prevé un aumento de estas cifras si no se toman medidas a tiempo. “Es un problema global que afecta a la salud humana, la salud animal, la fitosanidad y el medio ambiente”
España, en 2021 fue el séptimo de 29 países europeos con mayor consumo y está por encima de la media europea. Desde 2017 y hasta 2021, se produjo una disminución, pero en el año 2022, según datos del Plan Nacional Resistencia antibióticos (PRAN), el consumo ha aumentado. Las cifras de consumo en Europa en 2022 se publicarán próximamente. Sin embargo, “hasta el momento no se conocen datos oficiales relativos al consumo de antibióticos en población pediátrica y resulta imprescindible para analizar la tendencia y evaluar el resultado de las intervenciones realizadas”, indican desde el GPI de AEPap.
De acuerdo con datos del Eurobarómetro de 2022 sobre uso de antibióticos en Europa, el 46% de encuestados en España cree erróneamente que los antibióticos curan infecciones producidas por virus y un 36% que son eficaces contra los catarros. Solo un 20% recuerda haber recibido información en los últimos 12 meses sobre la toma de antibióticos innecesarios, siendo los médicos la mayor fuente de información. “Estos datos muestran la necesidad de mejorar los conocimientos de la población, lo que adquiere especial importancia en la población pediátrica, ya que la mayoría de las infecciones en niños son de origen viral” aseguran desde el GPI AEPap.
En España, en los últimos años se han desarrollado los llamados PROA, programas de optimización del uso de antibióticos, que recogen todos los aspectos relacionados con este objetivo. “Sin embargo, su implementación es desigual en las distintas comunidades autónomas: no alcanzan a todos los profesionales, no está asegurado el acceso a la información necesaria para realizar una prescripción adecuada y no siempre se revierten al profesional los resultados de las estrategias e intervenciones realizadas. Tampoco se ha llevado a cabo una intervención efectiva sobre los factores asistenciales que influyen en la prescripción”.
Para que estos programas consigan su objetivo “deben difundirse e implicar a todos los profesionales y aportar herramientas prácticas que ayuden a la prescripción”. Es necesario que los pediatras se integren de forma efectiva en la estructura y desarrollo de los mismos. “Los profesionales debemos actualizar nuestros conocimientos con el fin de optimizar la elección, las dosis y la duración de los tratamientos antibióticos, utilizar, cuando sea posible, estrategias de prescripción diferida y evitar, explicando los motivos a las familias, la prescripción de antibióticos en procesos virales. Pero sin la participación y compromiso del resto de instancias implicadas, la labor de los profesionales no es suficiente para conseguir el objetivo” afirman desde GPI AEPap.
Desabastecimiento, más grave en Pediatría
Según señalan desde la sociedad científica, en el último año los problemas de desabastecimiento, "en ocasiones de origen incierto, han afectado y afectan a determinados antibióticos de primera elección obligando a la utilización de otros fármacos de espectro más amplio, con el riesgo que supone con respecto al aumento de resistencias". Este problema es más grave en pediatría porque añade al desabastecimiento de fármacos el de presentaciones adecuadas para administración infantil.
Desde GPI Aepap consideran que “es un tema prioritario que debe ser resuelto por las autoridades sanitarias porque la falta de antibióticos de primera elección implica el fracaso de cualquier otra medida o intervención dirigida a la mejora de la prescripción”.
Por último, es necesario destacar la importancia de la prevención de enfermedades infecciosas informando a la población sobre medidas higiénicas como lavado de manos y asegurando altas coberturas vacunales.