El Ministerio de Sanidad y la Consejería de Sanidad han activado un protocolo de vigilancia epidemiológica. Este plan incluye una evaluación diaria de la situación, con el objetivo de detectar de forma precoz cualquier brote de infección en las zonas afectadas y controlar su evolución.
El contenido del protocolo se corresponde con la información que ambas instituciones han venido anunciando en los últimos días y está orientado a identificar rápidamente posibles casos de enfermedades transmisibles después de la DANA.
Fundamentalmente el protocolo aúna los dos criterios principales. Por un lado el criterio epidemiológico, cuando la persona ha estado expuesta a zonas inundadas por la DANA y por otro el criterio clínico. Es decir, cuando la persona presenta síntomas que sugieren una posible enfermedad transmisible. En el primero de los casos, el criterio incluye a la los residentes de las zonas afectadas, personas que han participado en tareas de limpieza y recuperación y convivientes de las personas mencionadas anteriormente. Mientras que en el segundo se agrupan en diversos grupos de enfermedades como transmisión alimentaria-hídrica; gastroenteritis aguda leve: persona que presenta signos y síntomas de gastroenteritis aguda sin signos de gravedad; gastroenteritis aguda grave: persona que presenta signos y síntomas de gastroenteritis aguda con signos de gravedad, entre los que se encuentran la diarrea sanguinolenta, profusa, con productos patológicos, con deshidratación, acompañada de fiebre alta, etc. Ictericia aguda: persona que presenta ictericia aguda, caracterizada por la coloración amarillenta de la piel y mucosas, coluria y/o acolia; sospecha de leptospirosis: persona que presenta fiebre más 2 de los siguientes síntomas: escalofríos, cefalea, mialgias, erupción, inyección conjuntival, ictericia, miocarditis, fallo renal, hemoptisis, otras manifestaciones hemorrágicas. También se incluyen las enfermedades por transmisión respiratoria como sospecha clínica de neumonía: persona que presenta una infección respiratoria aguda compatible con neumonía.
Junto a ello también se atenderán otros cuadro clínicos como eningo-encefalitis aguda: fiebre elevada sin causa aparente, dolor retroocular, signos meníngeos, o signos de alarma como dolor abdominal, vómitos persistentes o sangrado; síntomas específicos como debilidad muscular, confusión, o erupciones cutáneas. Fiebre con exantema: persona que presenta y erupción puntiforme de color rosado. Sepsis: persona que presenta sepsis (cuando el sistema inmunitario reacciona de manera exagerada a una infección.
El protocolo establece, además, criterios específicos para la toma de muestras, que se analizarán en el centro de salud u hospital, según la complejidad del caso y el tipo de análisis requerido, y el procedimiento de notificación de casos. La información sobre los casos detectados se notificará al Centro Nacional de Epidemiología y al Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, asegurando una respuesta coordinada a nivel nacional.
Desde el Ministerio de Sanidad además se ha indicado que se recomienda a los profesionales sanitarios revisar el estado de vacunación de las personas que acuden a consulta, aprovechando cualquier oportunidad para completar el calendario vacunal.