Las infecciones de transmisión sexual (ITS) no han dejado de crecer en España. Así lo refleja el ‘Informe de Vigilancia Epidemiológica de las Infecciones de Transmisión Sexual de 2022′ elaborado por la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica (RENAVE) y publicado por el Ministerio de Sanidad. En 2022, se registraron 23.333 casos de gonorrea, 26.518 casos de clamidia y la sífilis alcanza la tasa más elevada desde 1995.
El informe repasa la incidencia y evolución en España en 2022 de cinco de ellas: sífilis e infección gonocócica entre 1995 y 2022, sífilis congénita desde el año 2000, e infección por Chlamydia trachomatis (clamidiasis) y linfogranuloma venéreo desde 2016.
El trabajo recoge los casos notificados por los sistemas de salud de las comunidades autónomas de sífilis, sífilis congénita, infección gonocócica (gonorrea), clamidia y el linfogranuloma venéreo (LGV). La mayoría de los pacientes atendidos por estas enfermedades son hombres y jóvenes. Nueve de cada diez casos registrados pertenecen a la población masculina y más del 50% de las infecciones se detectaron en personas de entre 25 y 34 años.
Se confirma la tendencia creciente de la infección gonocócica y de la sífilis, observada a partir del inicio de la década de 2000. El incremento continuado de incidencia por infección gonocócica desde el año 2001 se consolida y, con respecto a la sífilis, España tuvo en 2022 la tasa más elevada de esta enfermedad desde 1995, año en que la infección fue sometida a vigilancia epidemiológica a nivel estatal. En el caso de la clamidiasis, también se observa una tendencia creciente en el periodo analizado (2016-2022), con la tasa más elevada en 2022.
La diferente incidencia de infección por comunidades autónomas en 2022 es muy variable: entre 6,94 y 121,88 casos por 100.000 habitantes. Las tasas más elevadas se registraron en Cataluña (121,88), País Vasco (63,82), Madrid (58,89) y Baleares (48,61); y las más bajas se notificaron en Melilla (4,83), Extremadura (6,94), Castilla La Mancha (10,30) y Asturias (10,54). Ceuta no notifico ningún caso en 2022.
Por edad, las tasas más altas se registraron entre los jóvenes de 20 a 24 años (198,23) seguidas del grupo de 25 a 34 años (167,60). La diferencia por sexo también es abismal: hay 81,31 casos por cada 100.000 habitantes hombres frente a 19,59 casos por cada 100.000 habitantes mujeres.
En líneas generales, se observa una mayor afectación en hombres que en mujeres para todas las ITS. La mayoría de los casos se produjeron en adultos jóvenes, aunque se observan algunas diferencias según enfermedad. Además, la comparación de las tasas de incidencia de ITS por comunidad autónoma se ve limitada por las diferencias en los sistemas de vigilancia autonómicos. Cabe destacar el descenso producido en los casos notificados en 2020 de ITS incluidas en este informe, atribuible en mayor o menor medida a diferentes factores asociados a la situación de pandemia por Covid-19, indica el ISCIII.