Preguntado por la fecha de una eventual normalización en el suministro de Bexsero, Guillermo de Juan, director de Relaciones Institucionales de GSK en España, ha afirmado, en el marco de un encuentro celebrado por la compañía con motivo de la celebración de la Semana Mundial de la Inmunización, que están haciendo un esfuerzo "titánico para poder atender la actual demanda", aunque ha reconocido que "la complejidad en la fabricación" de las vacunas, no sólo de ésta para el meningoco B, juega en contra de los deseos del laboratorio de cumplir con su obligación de suministrar tantas dosis como se están pidiendo en las oficinas de farmacia, una situación que ha llegado a generar listas de espera.
Pese a ello, De Juan ha subrayado que en los primeros cuatro meses de 2017 "se han duplicado las dosis suministradas al mercado español si se compara con el mismo periodo del año anterior", y ha remarcado que las estimaciones de la compañía pasan por "conseguir suministrar más dosis de Bexsero en 2017 que en 2016". "La intención", añadió , "es priorizar el abastecimiento del mercado español frente a otros países".
De momento, dado los problemas de producción que ya ha referido el laboratorio, y a la espera de que entre en funcionamiento la nueva planta de Alemania entre 2020-2021, lo que que queda es tejer una fuerte colaboración con las autoridades y el resto de los agentes de la cadena, de cara a una priorización de los menores de 2 años, que en teoría son los que más se pueden beneficiar de esta vacuna. En este sentido, y admitiendo "la obligación" que tiene la compañía de suministrar el mercado una vez la vacuna ha sido autorizada para su uso en nuestro país, De Juan ha señalado que los datos de prevalencia que maneja el Insituto de Salud Carlos III indican que ésta "es baja, por lo que no hay motivos para la alarma".
Complejidad del proceso de fabricación
Sobre la complejidad intrínseca al proceso de fabricación de Bexsero habló también Pilar García Corbeira, directora Médico del área de Vacunas de GSK en España, quien se refirió al hecho de que tanto los cuatro componentes que conforman la vacuna como las sales de aluminio que los acompañan sean producidos en lugares diferentes (Alemania, Italia y Austria, concretamente). Esto es así, explicó, porque existe "una alta especialización" en las plantas de producción de estos productos.
A esto sumó, los cientos de controles de calidad que tienen que pasar las vacunas en los países de productores y en los países de destino, los cuales no siempre son coincidentes. "Todo esto implica una mayor vulnerabilidad en la cadena de suministro y nos impide satisfacer cambios en la demanda con la agilidad que nos gustaría", afirmó.
Experiencia en Reino Unido
Al margen de los problemas de suministro que existen con Bexsero, García Corbeira quiso poner en valor el potencial de esta vacuna, tras los primeros resultados del programa de vacunación implementado en Reino Unido en 2015. En total, se habrían vacunado unos 600.000 niños, con una tasa de respuesta que se situaría, según indicó, en el entorno del 83%, según los datos recogidos en los primeros diez meses.
A la espera de que haya estudios que abarquen un mayor periodo, el 17% restante se explicaría, en primer lugar, por el hecho mismo de que ningún producto farmacéutico sea 100% infalible. Además, restado un margen de error razonable, García Corbeira achaca al propio diseño del programa de vacunación (dos dosis en el primer año de vida más una posterior de recuerdo) una posible reducción de su efectividad y recuerda que la ficha técnica aprobada incluye una fórmula de 3+1. Asimismo, hace referencia a la variabilidad existente del serogrupo B meningoco, que puede hacer que haya niños no respondedores que necesiten un producto más afinado.
Nicolas Gonzalez Casares: