Los consejos generales de dentistas, enfermeros, farmacéuticos, médicos y veterinarios han respondido al protocolo de actuación frente al coronavirus aprobado el 31 de marzo por el Ministerio de Sanidad, para expresar su "absoluto rechazo respecto de las medidas y recomendaciones contenidas en este documento", algunas de las cuales, indican, "suponen un riesgo elevado contra la seguridad de los profesionales y de sus pacientes".
Especialmente alarmante sería, dicen, el punto B. 2, sobre la incorporación al puesto de trabajo de los profesionales sanitarios transcurridos siete días desde el inicio de los síntomas y en ausencia de fiebre cuando no se realiza prueba diagnóstica. Tampoco incluye la Guía, se quejan, la situación de muchos profesionales asistenciales que no se encuentran en el ámbito hospitalario y que se encuentran en diferentes centros y establecimientos sanitarios, de adscripción pública y privada.
"No podemos aceptar, de ninguna manera, que ningún profesional sanitario sin hacerse el test y con pruebas confirmadas de negatividad se incorporen a sus puestos de trabajo, ya que supone un riesgo elevado para la población, pacientes atendidos, compañeros de trabajo e incluso su propia salud", apuntan, y se quejan de que esta medida evidencia, por un lado, .
Dicha pauta de actuación introducida por el Ministerio de Sanidad viene a evidenciar dos realidades. Por un lado, "la ausencia de test suficientes para poder afrontar con garantías la pandemia de coronavirus y su expansión", y, por otro, "la falta de planificación necesaria en recursos humanos para poder cubrir las contingencias que genera la alta infestación en personal sanitario sin políticas de reingresos tras periodo de curación clínica de garantías".
A este respecto, los representantes de estas profesiones se quejan de que España es "el país con mayor número de sanitarios contagiados del mundo", y opinan que la solución de reincorporarlos a toda prisa "supone una temeridad inaceptable que puede provocar un aumento mayor aún de la expansión del virus entre los profesionales sanitarios, pacientes y ciudadanos".
Según los consejos colegiales, las experiencias en países que han conseguido un mayor control de contagios demostrarían "que es fundamental hacer el test a los profesionales sanitarios de forma masiva con intención de conocer, con total certeza y evidencia científica, quién debe incorporarse con garantías al puesto de trabajo tras haber padecido la infección".
A este respecto, subrayan que ha sido "reiterada" la denuncia por falta de test de diagnóstico y equipos de protección necesarios. No obstante, consideran que esta última medida "no solo traspasa los limites científicos, sino los deontológicos de nuestras organizaciones, y sin duda los jurídicos al poner en riesgos no solo al profesional sino a los ciudadanos a los que atiende".
Los consejos se despiden pidiendo "medidas eficaces, efectivas y eficientes", así como "una dirección firme y confiable", y ponen a disposición la colaboración de las profesiones que representan para ello.