Desde que se ha iniciado la pandemia del covid-19 hay un elemento que se cita siempre como esencial para frenar la enfermedad, especialmente en sus estadíos iniciales, pero también para conocer cómo está transcurriendo la misma: test, test, test.
Ahora, un estudio realizado en Islandia viene a dar más luz sobre el efecto de la aplicación masiva de test y sus implicaciones en la propagación temprana del virus SARS-Cov-2, causante de la enfermedad covid-19 demuestra la necesidad de hacerlo para frenar la enfermedad.
El estudio, publicado en The New England Journal of Medicine e impulsado por deCODE Genetics, compañía subsidiaria de la biotecnológica Amgen, en colaboración con el Iceland’s Directorate of Health y la National Unversity Hospital de Islandia, ofrece una visión, lo más comprensiva posible, sobre cómo se propaga el virus entre la población, en este caso de 360.000 islandeses, y cómo las medidas de contención como son el diagnóstico temprano y masivo, el seguimiento de los casos o el aislamiento pueden ayudar a frenar la enfermedad.
El estudio, finalizado el 4 de abril, ha realizado más de 60.000 test por millón de habitantes tanto a personas con síntomas como a la población general. Desde la finalización del estudio, Islandia está realizando diariamente otros 4.000 test por cada millón de habitantes. Las autoridades sanitarias islandesas empezaron realizar análisis a aquellas personas que volvían de zonas consideradas de alto riesgo, como las zonas de esquí de los Alpes, y a los que ya a principio de febrero habían mostrado algún síntoma, lo que supone incluso un mes antes de la confirmación del primer caso en Islandia (el 28 de febrero).
El 4 de abril, estudio había identificado 1.221 casos positivos (13,3%) de entre 9.199 personas de alto riesgo: aquellas que presentaban síntomas, las que provenían de viajes de países con alta incidencia y sus contactos. Todos los casos confirmados fueron aislados y a las personas con la que habían tenido contacto se les realizó un seguimiento y estuvieron en cuarentena domiciliaria de 14 días.
Para complementar el testeo y maximizar el alcance del estudio, el 13 de marzo deCODE empezó a realizar análisis de forma voluntaria y gratuita a aquellos ciudadanos que se inscribieron. El 1 de abril ya eran 10.797 personas las que habían sido testadas con 87 nuevos casos positivos (0,8%) identificados. Entre el 1 y el 4 de abril, se han testado a otras 2.283 personas seleccionadas de forma randomizada con 13 nuevos positivos (el 0,6%). El análisis combinado de la información recopilada sugiere que los niños y las mujeres son, por lo general, menos susceptibles a contraer SARS-Cov-2 que los hombres y los adultos.
"Nuestro objetivo es obtener un mapa completo de la epidemiología molecular de la covid-19 en Islandia, para poder proporcionar datos a todo el mundo y ayudar a frenar la propagación de la enfermedad", comenta Kari Stefansson, CEO de deCODE Genetics y autor principal del artículo.
El estudio ha permitido también realizar un árbol genealógico del virus y conocer el origen de la infección en la isla. Según estos datos, parece que entró procedente de muchos países y se han encontrado hasta 291 mutaciones exclusivas de Islandia. Según explican los autores, una de las utilidades de la secuenciación del virus es que permite rastrear los contactos y las infecciones adicionales provenientes de casos confirmados.
Estos datos, y el hecho de que la mayoría de las nuevas infecciones provienen de aquellos que ya están en cuarentena, subraya la eficacia general de los esfuerzos de las autoridades sanitarias para rastrear y aislar estos contactos y controlar aún más la propagación del virus.
"Es de vital importancia conocer cómo se propaga el virus en las diversas comunidades”, explica José Motellón, director Médico de Amgen en España y Portugal. “Estamos seguros de que la respuesta rápida de deCODE a esta emergencia y los conocimientos generados serán clave para ofrecer una base científica más sólida que ayude a las autoridades sanitarias a tomar las medidas necesarias ", concluye.