Tras haber estado por encima de Italia en número de muertes diarias por covid-19 durante muchos días, desde el pasado 19 de abril, los datos oficiales de fallecimientos diarios en España son inferiores a los de Italia y apuntan ya a un descenso, lento pero claro.
En los últimos días, España está registrando cifras de muertes en torno a los 400 fallecidos, habiendo alcanzado los 348 el pasado 17 de marzo. Italia, por su parte, presenta una reducción más lenta que España. En este sentido, es de destacar que desde el pasado 10 de abril, solo en tres ocasiones nuestro país ha tenido más fallecimientos que el país transalpino.
Con estos últimos datos, España alcanza los 21,717 fallecidos, mientras que Italia presenta 24.648. Francia también está en cifras próximas, al haber notificado 20.796. Por su parte, la letalidad en España se sitúa en el 10,4%, mientras que en Italia es del 13,3% y en Francia del 13% y en Reino Unido del 13,2%. Todas estas cifras distan mucho del promedio global del 6,9% y, en especial del 2,2% de Corea del Sur o el 3,6% de Alemania.
Líderes en tasas de mortalidad
En términos de fallecidos por 100.000 habitantes, España sigue a la cabeza del mundo, con 45,3 fallecidos por 100.000 habitante, mientras que Italia registra 40,0; Francia 30,2 y Reino Unido 27,2.
En cualquier caso, cabe recordar que las cifras de todos estos países habría que ponerlas en mayor o menor medida en cuarentena. En el caso de España es sabido que solo se notifican como fallecidos por covid-19 aquellos a los que se ha realizado un test, por lo que la mayoría de los fallecidos en residencias de ancianos o domicilios particulares no aparecerían en esas estadísticas.
Madrid y Cataluña han empezado a informar del número total de fallecidos. En el caso de Cataluña, los 4.247 fallecidos oficiales se convierten, según la propia Generalitat en 8.845, un 108% más. Para el caso de Madrid, el total de fallecidos a causa del coronavirus se situaría en 11.852, un 56,4% más que los 7.577 oficiales. No son las únicas comunidades autónomas en las que los datos reales son mucho mayores que los oficiales. Ejemplo de ello son las dos castillas o la Comunidad Valenciana, donde los tribunales están realizando recuento de los muertos fuera de los hospitales ya que las cifras oficiales no cuadran con las licencias de enterramiento.