Una de las consecuencias indirectas de la pandemia de Covid-19 ha sido la pérdida de contacto de algunas personas y familias con el sistema sanitario, con la consiguiente interrupción en las actividades de prevención y promoción de la salud, incluida la vacunación rutinaria. Con motivo de la Semana Mundial de la Inmunización, que se celebra entre el 23 y el 30 de abril, la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap) insta a recuperar las coberturas de vacunación en los niños y adolescentes, así como en embarazadas, de cara a la protección de los recién nacidos.
“En los primeros momentos de la pandemia se notificó en algunas comunidades autónomas un descenso de las coberturas de vacunación. Con posterioridad, y según se retomó la actividad en los centros sanitarios, la revisión del estado de vacunación de los pacientes ha sido una de las prioridades para los pediatras de Atención Primaria”, explica la Dra. Rosa Albañil, coordinadora del Grupo de Patología Infecciosa de la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap). “Sin embargo, dado el curso fluctuante de la pandemia con sucesivas modificaciones en la organización de la asistencia, creemos que puede haber pacientes cuya inmunización no es óptima”, explica.
En concreto, de acuerdo con los datos del Ministerio de Sanidad sobre coberturas de vacunación en población pediátrica correspondiente a 2020 (aún no definitivos), “se observa una disminución en las coberturas de recuerdo de las vacunas de meningococo C de los 12 meses y la dTpa [difteria, tétanos y tosferina] a los seis años, y de ambas dosis de la triple vírica [sarampión, paperas y rubéola]”, explica el Dr. Ángel Hernández Merino, pediatra de Atención Primaria y colaborador del Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría (AEP).
De hecho, “en la actualidad sólo cinco comunidades autónomas cumplen el objetivo de alcanzar coberturas de vacunación del 95% con dos dosis de triple vírica a los 3-4 años de edad, lo cual resulta fundamental para impedir la circulación del virus del sarampión”, explica el Dr. Hernández Merino. En este sentido, recuerda que “hace muy pocos años se registró en algunos países de Europa un elevado número de casos de sarampión” vinculados a la disminución en las coberturas de vacunación.
“No hay que olvidar que los procesos infecciosos pueden surgir en cualquier lugar del mundo y, debido a la globalización, los estilos de vida y los movimientos de las poblaciones, pueden hacer que se extiendan, tenemos ejemplos recientes, al resto del mundo”, comenta la Dra. Albañil.
En cuanto a otras inmunizaciones, la AEPap considera de especial interés la cobertura frente a la meningitis en los adolescentes. “El proceso de captación de estos pacientes, debido a un cambio en la administración de la vacuna, ampliando la cobertura frente a los serotipos A, W e Y, se interrumpió al iniciarse la pandemia de Covid-19, con el agravante de tratarse de personas, en general sanas, con escasos contactos con los servicios sanitarios. Por todo ello y según el último informe, las coberturas de inmunización frente a los meningococos en adolescentes son muy bajas en algunas comunidades autónomas”, señala el Dr. Ángel Carrasco, coordinador del grupo VacunAEPap
Asimismo, “hay que tener en cuenta, por las implicaciones para nuestros pacientes más pequeños, la desigual cobertura vacunal de embarazadas frente a la tosferina en distintas comunidades”, apunta el Dr. Carrasco.
Por otra parte, AEPap recuerda la importancia de valorar y actualizar el calendario vacunal de acuerdo a los vigentes en cada comunidad, de pacientes que contactan por primera vez con nuestro sistema sanitario. Muchos de ellos han salido de sus países en condiciones de urgencia y precariedad, por lo que no podrán aportar registros fiables y, además, la situación en sus países de origen probablemente haya dificultado la administración de las vacunas correspondientes.
“Algunos de estos pacientes, pueden ya llevar tiempo entre nosotros, pero, por la pandemia y la ralentización administrativa que ha producido, pueden no haber regularizado su acceso a la sanidad”, señala el Dr. Carrasco.
Los tres portavoces de AEPap coinciden en que vivimos un momento crítico, “en el que somos plenamente conscientes del significado de una pandemia, de las repercusiones que seguimos padeciendo a todos los niveles y en el que asistimos al desplazamiento de millones de personas en condiciones críticas”. Es ahora cuando “los profesionales sanitarios, además de instar a las autoridades sanitarias a poner en marcha medidas que faciliten la captación activa de los pacientes insuficientemente vacunados, debemos aprovechar cualquier contacto con los pacientes para comprobar su estado vacunal e iniciar inmediatamente, cuando sea preciso, la corrección del mismo”.