“Tras un año de incertidumbre por la Covid-19, en el que familias, docentes y empleados de centros escolares han hecho un gran esfuerzo, nos encontramos ante un nuevo curso con muchas dudas”, ha asegurado la vicepresidenta segunda de la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap), Teresa Cenarro, ante el inicio del primer curso sin medidas Covid desde hace dos años.
La misma opinión mantiene el vicepresidente tercero de AEPap, Pedro Gorrotxategi, quien afirma que “la incidencia de Covid-19 está a la baja, pero no sabemos qué pasará cuando vuelva el frío, a lo que se unen las informaciones sobre nuevos virus emergentes y brotes epidémicos, como el de la viruela del mono, que se ha extendido rápidamente por Europa. Esto aumenta la incertidumbre”.
Ante este situación la AEPap ha consensuado una serie de recomendaciones y medidas de protección general en la nueva normalidad entre las que destacan, entre otras, el mantenimiento del calendario vacunal. También incluyen el lavado de manos, ya sea con gel hidroalcohólico o con agua y jabón; tapar la boca con pañuelos desechables, o bien con el codo, al toser y estornudar, para evitar que las manos sean vehículo de transmisión de infecciones; realizar actividades en el exterior cuando las condiciones climáticas lo permitan; la ventilación adecuada de los interiores en los centros educativos; o que los menores enfermos, por ejemplo, si han presentado fiebre la noche o el día anterior, no acudan al colegio hasta que desaparezcan los síntomas.
Igualmente los pediatras de Atención Primaria recuerdan que el colegio puede ser un escenario de contagios no sólo de Covid-19, sino de otras infecciones comunes. “En los primeros años de escolarización, los niños sufren con frecuencia otras infecciones como la conjuntivitis, catarros, bronquiolitis, gripe y gastroenteritis aguda. La bronquiolitis afecta a tres de cada cuatro de los menores de dos años. También la gastroenteritis por rotavirus afecta, sobre todo, a los niños más pequeños. Ambas enfermedades se dan, en general, entre los meses de octubre y febrero”, comenta Cenarro.
Ante esta situación, como cada inicio de curso, los pediatras recomiendan mantener al día el calendario de vacunación, con todas las inmunizaciones recomendadas por los pediatras para los niños y demás miembros de la familia. “Las vacunaciones del rotavirus (para lactantes menores de seis meses) y la gripe (a partir de los seis meses de edad) están incluidas en los calendarios vacunales oficiales solo para algunos niños de más riesgo; la del rotavirus, para los nacidos prematuros y la de la gripe para los que padecen otras enfermedades de riesgo (cardiopatías, inmunodepresión, etc.). Pero ambas vacunas pueden ser usadas en todos los niños, a la edad correspondiente de cada una, pare mejorar la protección natural frente a estas infecciones”, asegura Hernández Merino, portavoz de AEPap en vacunas y asesor del Comité de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría (AEP).