La Sociedad Española de Farmacia Clínica, Familiar y Comunitaria (Sefac) ha reiterado su posición en relación a la necesidad de poner en marcha los mecanismos necesarios para habilitar la dispensación sin receta en farmacia comunitaria de la píldora anticonceptiva de solo gestágenos que permita su acceso a las mujeres. Igualmente ha anunciado que está preparando una formación, que verá la luz en diciembre, para formar a los farmacéuticos para que “puedan indicar la anticoncepción de forma segura”.
El pasado 13 de julio, la FDA aprobó la venta sin receta de Opill (norgestrel), primer anticonceptivo oral diario aprobado en Estados Unidos para el que no es necesaria la receta médica.
La disponibilidad a gran escala de este anticonceptivo, razona la FDA, “puede ayudar a reducir la cantidad de embarazos no deseados y sus posibles impactos negativos”. Se trata de un argumento, en valoración de Sefac, “que puede extrapolarse a otras realidades sociosanitarias. Sin ir más lejos, en España, casi una de cada cuatro mujeres (23%) está en riesgo de tener un embarazo no planificado, según datos de la Sociedad Española de Contracepción. Por otra parte, la tasa de interrupciones voluntarias del embarazo fue de diez por cada mil mujeres de entre 15 y 44 años, según los últimos datos disponibles al respecto del Ministerio de Sanidad”.
“Este paso adelante de la FDA”. Según Sefac, abunda en la línea ya iniciada en Reino Unido “para apoyar el empoderamiento de la mujer y su derecho a decidir sobre su salud sexual y reproductiva, así como para facilitar el acceso a los métodos anticonceptivos como elemento fundamental para la mejora de la planificación familiar”.
Desde Sefac, “solicitamos a las autoridades sanitarias competentes, tanto a nivel nacional como Europeo, que den los pasos necesarios para que la píldora anticonceptiva de solo gestágenos pueda ser dispensada en farmacias sin receta, como ya sucede en otros países como Reino Unido, al cumplir con todos los requisitos necesarios para ser un medicamento no sujeto a prescripción; entre otros, por su alta seguridad y efectividad, una relación de beneficios que superan a los riesgos y su bajo potencial de uso indebido y abuso”.
La dispensación en farmacias de píldora de solo gestágenos, indican desde la sociedad científica “podría además contribuir a derribar las barreras que en la actualidad impiden la utilización de métodos anticonceptivos, como es el caso del requisito de receta médica”.
Posicionamiento
El pasado año se presentó un documento de posicionamiento con la colaboración de varias sociedades científicas tanto médicas (Semergen, Semg) como farmacéuticas (Sefac), que ya recogía esta petición de desestimar la necesidad de la receta médica para facilitar el acceso a los anticonceptivos de solo gestágenos. En España, los farmacéuticos comunitarios están integrados en la atención de la salud sexual y reproductiva, dado que ofrecen asesoramiento sobre anticoncepción de urgencia sin receta médica desde 2009.
En dicho posicionamiento se dejaba constancia de que en la actualidad se dan las circunstancias necesarias que propician que los anticonceptivos hormonales orales, más en concreto los de solo gestágenos, puedan ser dispensados en las farmacias comunitarias sin que sea necesaria una prescripción médica. Entre otros beneficios, esta medida contribuiría a reducir la sobrecarga asistencial en los centros de atención primaria y planificación familiar.
Dicho consenso fue concebido por las entidades que lo elaboraron como el primer paso de una estrategia que continuará a corto y medio plazo, y que incluirá la publicación de guías y protocolos de actuación consensuados en la materia, así como formación específica dirigida para los farmacéuticos comunitarios.
En este sentido, SEefac está ultimando los detalles de una formación en salud sexual y reproductiva -que estará disponible en diciembre-, para que, entre otros contenidos, todos los farmacéuticos comunitarios puedan indicar la anticoncepción de forma segura y llevar a cabo la educación sanitaria con consejos y recomendaciones consensuados con sociedades médicas como Semergen y Semg. Esta formación integral, de carácter teórico-práctico, hará especial hincapié en la necesidad de observar el circuito asistencial de derivación al médico cuando surjan alarmas o alertas que indiquen que el paciente, por su condición, necesita ser atendida por un médico.
La formación, con la colaboración de estas sociedades, permitirá a las mujeres contar con una red de farmacias próxima y accesible regentada por farmacéuticos con información específica y actualizada para acompañarla en su toma de decisiones y despejar sus dudas, en base a protocolos consensuados con médicos.