“El compromiso de la dirección hospitalaria es crucial para garantizar la implementación efectiva, optimizar el uso de antibióticos y reducir la aparición de resistencias", afirma Antonio López Navas, coordinador de Salud Humana del Plan Nacional frente a la Resistencia a los Antibióticos (PRAN).
López Navas ha realizado estas declaraciones durante su participación en un webinar organizado por la Sociedad Española de Directivos de la Salud (Sedisa) y Menarini, con el objetivo de poner de relevancia el papel clave de los directivos de la salud en la lucha contra la resistencia a los antimicrobianos y su impacto en el Sistema Sanitario.
José Soto Bonel, presidente de Sedisa ha asegurado en el encuentro, que los directivos de la salud “tenemos como misión impulsar la transformación de nuestro Sistema Sanitario a través de experiencias, que vamos difundiendo, que vamos contando, que vamos incentivando, y es que la Gestión Basada en Valor que engloba todo esto es para los Directivos de la Salud un compromiso de trabajar, en este caso frente a la resistencia a los antibióticos, un problema muy actual y creciente".
López Navas destaca que el Plan Nacional de Resistencia a los Antibióticos, vigente desde hace una década, ha permitido establecer un marco de acción coordinado entre los Ministerios de Sanidad, Agricultura y Medio Ambiente, con la colaboración de todas las comunidades autónomas y más de 70 sociedades científicas.
"Los Directivos de la Salud tienen un papel fundamental en la implementación de este plan en los centros sanitarios, asegurando recursos formación y coordinación para optimizar el uso de antibióticos y prevenir infecciones", añade López Navas.
Joaquim Puig, director de Market Access and Public Affairs de Menarini España añade que "la lucha contra la resistencia a los antimicrobianos (RAM) supone priorizar modelos de atención basados en valor, en los que la prevención y el uso racional de los antibióticos sean ejes fundamentales".
Asimismo, destaca: "La Aemps, mediante el PRAN, promueve un liderazgo sólido de la gestión sanitaria y un mayor compromiso del sector farmacéutico para combatir las RAM”,
Entre los principales retos identificados para la gestión de la resistencia antimicrobiana, destaca la necesidad de fortalecer los recursos humanos especializados, mejorar los sistemas de información sanitaria y garantizar la formación continua de los profesionales. Además, se hace hincapié en la importancia de la colaboración público-privada para el desarrollo de nuevas estrategias y herramientas digitales, como la aplicación ProAPP, que optimiza la vigilancia y el uso de antibióticos en los hospitales.