Tras la decisión del Consejo de Ministros del pasado 29 de diciembre de autorizar la venta sin receta de los test de autodiagnóstico para el VIH, Mylan ha presentado un dispositivo de estas características, el cual, según la compañía, ofrece resultados en tan sólo 15 minutos. En opinión de Santiago Moreno, jefe de Servicio de Enfermedades Infecciosas del Hospital Ramón y Cajal, esta herramienta "puede ayudar a aumentar el número de nuevos diagnósticos y disminuir la fracción oculta de infección por VIH” si es utilizada adecuadamente.
Este dispositivo de diagnóstico funciona mediante un análisis de sangre basado en la técnica inmunocromatográfica. "Se trata de una reacción inmunológica antígeno-anticuerpo muy específica (en este caso, antígenos del VIH que reaccionan con anticuerpos específicos incluidos en la nitrocelulosa de la prueba) y posteriormente se revela mediante coloración. La prueba se acompaña de una línea de control para poder interpretar adecuadamente el resultado", explicó Moreno.
El jefe de Servicio de Enfermedades Infecciosas del Hospital Ramón y Cajal también destacó que esta prueba garantiza una sensibilidad del 100% y una especificidad del 99,8%, lo que supone, para alguien que utilice el test, que un resultado negativo "prácticamente le excluye" de estar infectado por VIH. "La única excepción práctica es que se encuentre en el denominado periodo ventana, es decir, que la infección haya sido muy reciente y todavía no haya dado tiempo a que la prueba se haga positiva", apunta. Este periodo se puede extender hasta tres meses, como indica la 'Guía de atención farmacéutica en la dispensación de productos sanitarios para el autodiagnóstico del VIH' que han editado el Ministerio de Sanidad y el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (CGCOF) para garantizar que la farmacia comunitaria pueda acompañar la dispensación con un buen consejo profesional.
En el otro extremo, precisó Moreno, están los casos en los que el test es positivo, lo que asegura, prácticamente, que el paciente "esté infectado". Aunque añade: "Dada la posibilidad de excepcionales resultados falsos positivos, se debe confirmar con pruebas sin margen de error que se encuentran en todos los laboratorios dedicados al diagnóstico microbiológico".
Apoyo al paciente en todo el proceso
Además del apoyo que pueda dar la oficina de farmacia, Ramón Espacio, presidente de la Coordinadora Estatal de VIH Sida (Cesida), señaló que desde su institución "se ha establecido un servicio telefónico que atienda a los usuarios del autotest para acompañarlos a lo largo del proceso, con el objetivo de reducir el impacto psicológico que un resultado positivo les pudiera producir. Este servicio es anónimo y confidencial".
En este sentido, enfatizó la ventaja que aporta la privacidad en el momento de la prueba: "Hay personas a las que les resulta difícil acercarse a su médico de familia para solicitar una prueba de VIH, especialmente en áreas rurales o ciudades pequeñas donde no hay otros recursos como clínicas de infecciones de transmisión sexual o ONG". De hecho, en la citada Guía de Sanidad y el CGCOF se establecen una serie de recomendaciones a las farmacias, entre las que destaca la habilitación de un espacio en la oficina de farmacia para que la prueba se pueda solicitar y dispensar en un entorno de confidencialidad.