La Comunidad Valenciana es la que más cambios ha sufrido debido a los últimos nombramientos de gobierno a nivel estatal dado que gran parte de la estructura de la Consejería de Sanidad ha pasado al Ministerio de Sanidad. El presidente del COF de Valencia y del consejo autonómico, Jaime Giner ha concedido a Diariofarma una entrevista en las que desgrana la situación actual y el futuro con los nuevos cargos. Giner, ha transmitido la importancia de fomentar más servicios desde la farmacia comunitaria y continuar con los proyectos iniciados. Si no se avanza en esa línea, si no se cambia la manera de actuar del farmacéutico, El presidente del MiCOF advierte de que el futuro del farmacéutico estará limitado.
Pregunta. ¿Cómo afronta este segundo mandato y qué retos se ha planteado?
Respuesta. Lo afronto con ilusión, en el sentido de que se ve satisfacción en los colegiados y, sobre todo, porque mantenemos un equipo, con pequeñas variaciones en la Junta de Gobierno. Se está trabajando de una forma fabulosa, se implican mucho, y tienen el espíritu y sacrificio que se necesita para estar en un colegio profesional, con los problemas que existen en la actualidad en el mundo de la farmacia.
P. ¿Cuáles son los retos que tiene la farmacia en la Comunidad Valenciana?
R. El reto actual, es terminar los asuntos que se han dejado pendientes, e intentar solucionar el resto. Debemos afrontar el tema asistencial de la farmacia comunitaria y sobre todo en los colegios de farmacéuticos. Además debemos seguir integrando a todos los sectores que, por algún motivo, se han ido distanciando, como la farmacia hospitalaria, atención primaria, salud pública etc. Son farmacéuticos, y este es un colegio de farmacéuticos, por ello, queremos representar a todos. Por ejemplo, respecto a la farmacia de atención primaria, hemos incorporado un vocal de farmacia de atención primaria.
P. ¿Qué cree que el Colegio puede ofrecer para ilusionar a esos farmacéuticos que han ido de forma paralela?
R. Creo que les debemos informar que estamos a su servicio, que vengan y pidan, que soliciten qué servicios necesitan de su colegio, y al mismo tiempo ofrecer todo lo que tengamos en nuestra mano. No hay límites, queremos defender su profesión. Respecto a las sociedades científicas, creemos que deben de estar. Y las patronales queremos que sean potentes y fuertes. Además, queremos potenciar nuestro trabajo con las sociedades científicas. Estas han visto que le podemos ayudar, defender y además potenciar.
P. ¿Qué cree que pueden aportar ellos, para que el colegio avance?
R. Ellos aportan conocimiento, pero yo quiero que realmente quien aporte sea el colegio, ellos aportan para enriquecer a la profesión, que creo que hace falta y que llevamos un buen camino, somos una profesión de futuro y en ciertos sectores hemos estado dormidos durante mucho tiempo.
P. ¿Cree por tanto, que se tienen que coordinar más los farmacéuticos de los diferentes niveles asistenciales y que tengan un punto en común en el colegio?
R. Indudablemente, yo creo que hay campos de mejora en todos los niveles asistenciales, pero trabajando juntos. Creo que así podremos sacar petróleo de nuestra profesión. Muchas veces, se piensa que por separado podemos conseguir algunas cosas, pero creo que la unión siempre nos va a favorecer.
P. Un ejemplo, de no trabajar juntos, ¿es lo ocurrido con Resi-EQifar?
R. Cierto, no obstante creo que ha sido más ocasionado por la administración y un sector. Pienso que la farmacia hospitalaria, en términos generales, está por la colaboración con la farmacia comunitaria. El programa que llevamos desde el colegio en el mundo sociosanitario, y en cualquier ámbito, no solo en el residencial tiene que contar con la farmacia hospitalaria.
P. ¿Y cómo se hace?
R. Hay muchos pacientes que están con medicamentos o tratamientos hospitalarios y que viajan frecuentemente al hospital, por lo tanto tienen que estar bajo el seguimiento de un farmacéutico hospitalario. Pero en la cercanía, consideramos que ese paciente, también se va a mover, ya que no olvidemos que aunque está dentro de un centro, es un paciente que en cualquier momento puede salir o entrar por su propia voluntad. Por ello consideramos que lo debe coordinar un farmacéutico comunitario, que va a desarrollar lo que considero que es el trabajo de infantería. También tenemos al farmacéutico de atención primaria que tiene que coordinar, tiene que establecer los procesos etc. Todos tienen que formar un equipo.
P. En cuanto a Resi-EQifar, ¿en qué situación se encuentra actualmente?
R. Ahora mismo, nos encontramos con una Ley de Ordenación que consideramos que es inconstitucional y continuaremos luchando para que así sea, se modifique y consiga tener una cobertura legal adaptada a la norma y la constitución. Una vez hecho esto, nos pondremos a trabajar con la administración y el resto de profesionales, para llegar a consensos con igualdad de oportunidades. consensos en el que se trabaje con la profesionalidad del farmacéutico, no con una empresa .
P. ¿Qué problemas en concreto encuentran en la aplicación de Resi-EQifar?
R. Nos podríamos sentar a trabajar, y podría ser un gran programa, pero Resi-EQifar no ha sido consensuado ni con pacientes, ni centros, ni con farmacia comunitaria, ni con nadie. Es un grupo reducido que no sabemos quienes son , pero nos los imaginamos. Todo ha venido impuesto con una modificación de la ley de ordenación, que excluía a la farmacia comunitaria. Creo no puede ser así, no se puede trabajar de esa manera. Después, cuando desmenuzas el programa, no es diferente al programa del que proponemos nosotros.
P. Además de la ley, ¿qué otros aspectos critica?
P. En el programa presentado por la administración, la elaboración de los SPD, que deberían hacerse por farmacéuticos comunitarios y hospitalarios, se realiza por una plataforma que, de momento, solo se ha presentado una empresa, parece que hay problemas y dudas y se está retrasando. Otras empresas de renombre han renunciado a presentarse y dicen que es inviable y una ruina. Además, hay unos 70 trabajadores, de ellos, más de 20 farmacéuticos que irán a la calle
P. ¿Cree que es posible reconducir la situación?
R. Yo creo que sí, el cambio político da un ventana de esperanza a que esto se reconsidere. Yo creo que dentro de la propia administración, poco a poco, han ido viendo lo que no han querido escuchar: que este modelo es inviable. Creo que se están generando dudas.
P. ¿En qué situación está el recurso de inconstitucionalidad de la Ley?
R. Depende de la voluntad política de la administración, hasta ahora estaba pendiente de ir al Tribunal Constitucional, por el propio gobierno, de hecho, se ha publicado en el Diario Oficial de la Generalitat Valencia (DOGV), una resolución en la cual se creaba una comisión bilateral. Ahora, con el nuevo gobierno, me imagino que no lo tramitarán. No debería ser así, pero imagino que no lo tramitarán. Espero que se recapacite, ya que se trazó en la comisión bilateral, pensamos que estaría bien que dentro de esta comisión se llegue a un consenso con buena voluntad, si no, nosotros continuaremos recurriendo, e intentaremos llegar al Constitucional. Si se lanzará un decreto basado en esta ley, lo llevaremos a los tribunales.
P.- ¿Qué puede decir de otro tema pendiente como es el decreto de Servicios Profesionales Farmacéuticos?
R. En teoría este Decreto quedó listo para publicar, ya había pasado el trámite de asesoría jurídica, realizamos alegaciones con claro interés de mejorarlo, no obstante, no sabemos si se tendrán en cuenta o no, pero ya esta para publicarse y ponerse en marcha. El Decreto es importante, ya que establece las bases para la acreditación y la concertación de servicios profesionales, no habla de ningún servicio profesional en concreto, simplemente establece que quien decidiera será el comité central de asistencia farmacéutica del convenio, al que se dirigirán las solicitudes para concertación de estos servicios y que establecerá el diseño, condiciones de capacitación y acreditación así como si es financiado.
P. ¿Cuál es la clave para que se valoren estos servicios por parte de la administración?
R. Una cosa que queremos que nunca falte en un servicio profesional, es que se establezcan unos indicadores, tanto de salud, económicos y laborales del servicio. Todo ello para poder realmente evaluar su resultado. Creemos, que si la administración no aporta esos indicadores de salud de los pacientes, no vamos a ninguna parte. Este decreto lo establece, por ello creemos que es importante.
P. Es decir la administración, tiene que ser consciente del valor que aporta...
R. Efectivamente, por ejemplo el Colegio de Farmacéuticos de Valencia junto con Sefac hemos desarrollado un programa en el que tenemos mucha ilusión que es ‘Indica + Pro’. Lo que establecemos es que en diez síntomas menores de los que hemos dado una formación específica, valoramos si hay algo más que debe ser asistido por un médico de atención primaria y derivamos al paciente con un protocolo. El farmacéutico está derivando solo un 10% de los pacientes a atención primaria, solucionando los problemas del 90% restante.
P. Respecto a Domi-EQIfar, ¿piensa que se puede retrasar los planes de la ex directora de Farmacia, en concreto que empezaran los pilotos antes del verano?
R. Yo espero que no. Con José Manuel Ventura, creo que no. Considero que la consejera, dejará continuar trabajar a los técnicos, ya está funcionando en Alicante, y aquí está listo para empezar. En la última reunión del comité central de asistencia farmacéutica quedaban temas por tocar, pero se iba a convocar, que lo vamos a pedir, un comité extraordinario para aprobarlo, está consensuado.
P. ¿Cree que Domi-EQIfar puede ser el ejemplo de integración del farmacéutico en el sistema?
R. Lo está siendo, tanto en Alcoy como en Arnau, yo creo que nuestro representante, con el director de enfermería, director médico y el centro de salud, los propios farmacéuticos comunitarios. Entre todos ellos existe una gran interacción.
P. Respecto al cambio de Consejera y Director General, incluso Ministra . ¿Qué cree que le espera a la farmacia con Carmen Montón y Patricia Lacruz?
R. Son dos personas a las que aprecio mucho, he trabajado con ellas intensamente. A pesar de las discrepancias, si no estamos de acuerdo, no estamos de acuerdo. Y debe ser así. Desde el primer momento en cuanto Resi-EQifar, dije que no, que no lo quería y aporte una opción. Desde que estamos la misma junta directiva,hace cuatro o cinco años, nosotros no vamos a decir no y punto. Vamos a decir no, pero presentaremos alternativas. Damos opciones, decimos no y el porqué .
P. ¿Qué espera de la Ministra Montón?
R. Yo creo que en el ministerio tiene que mirar más con una visión general. Respecto a Patricia [Lacruz] tiene una visión asistencial importante, creo que tiene claro qué es lo que es farmacia y profesión farmacéutica importante y que tiene un papel importante dentro de la sanidad, y se va a potenciar. Luego las maneras e ideología es lo que nos puede derivar a otros temas, yo no creo que vaya a perjudicar a la farmacia en general. Van a tomar medidas que nos gustaran o no, pero creo que en el tema de integración de la farmacia comunitaria en el sistema se trabajara bien con ella.
P. Una de las medidas que se han tomado en la Comunidad Valenciana, ha sido llevar algunos medicamentos de receta al hospital. Esa opción, con la bandera de la inequidad, ¿se puede trasladar al resto de España y en más medicamentos?
R. Yo le he dicho muchas veces a la directora general que tenemos que trabajar con farmacia hospitalaria para asistir al paciente en su lugar de residencia en el tema de medicamentos, no solo de diagnóstico hospitalario. También le he dicho que no nos considere un mero transportista, para eso que hable con la distribución, o incluso Amazon.
P. ¿En qué consiste eso de trabajar juntos?
R. Debemos hablar que desde farmacia hospitalaria se envíen al farmacéutico de comunitaria los medicamentos con unas indicaciones, con unos protocolos, con unas encuestas. De esta forma, el farmacéutico comunitario, cuando llegue el paciente, le haga un seguimiento y transmita esta información al hospitalario, para que lo evalúe. Además, periódicamente estos farmacéuticos se deberán reunir y debatir sobre estos temas y sobre los pacientes. De hecho, nos llego un programa ‘Symbiotic’ que estaba auspiciado por Antares, la Sefh y Sefac y nos ofrecieron hacer un pilotaje. Desde el primer momento dijimos que sí, pero luego se detuvo, no sabemos qué ha ocurrido. Así las cosas, no es la farmacia comunitaria la que no quiere ampliar sus miras. Tenemos clarísima una cosa, hemos salido y queremos salir de la zona de confort. Si no salimos de la zona de confort el futuro está limitado.
P. La zona de confort, ¿debe entenderse como la zona del margen, pasar a la zona de menos confort es servicios?
R. Se trata de estudiar un modelo de retribución, que no dependamos tanto del producto, tanto profesional como asistencialmente. Los trabajos de adquisición y custodia del medicamento los tiene que hacer un farmacéutico, pero, por otro lado, la dispensación es un servicio profesional que hemos olvidado, que hemos dejado unido al producto, a la adquisición y custodia, y no lo hemos sabido diferenciar y eso está haciendo perder valor a la farmacia profesional, a la profesión. La dispensación no es cortar un precinto y pegarlo en un receta y aquí tiene usted el medicamento. Un paciente no se tiene que ir del mostrador, sin saber cada medicamento para qué es, cómo se lo tiene que tiene que tomar, qué beneficios le reporta y que perjuicios tiene no tomarlo.
P. ¿Y eso cómo se valora?
R. Ante un paciente, el farmacéutico tiene que conocer si ha sucedido un problema relacionado con el medicamento o una reacción adversa. Debe preguntar si se encuentra bien o tiene alguna molestia, y llegar a más, se deberían registrar los datos cuando se cierra la dispensación. Se debería realizar y remunerarse. La dispensación está perdida actualmente, con el sistema que existe nos vamos a la ruina. El margen cada vez es menor, bajan los precios y bajan los márgenes y la farmacia cada vez tiene menos recursos. De la otra manera tendremos más profesionales farmacéuticos trabajando en una oficina de farmacia, más estabilidad y mucho más reconocimiento.
La dependencia del producto no es buena por las razones que Jaime explica perfectamente y porque mantiene una dependencia de la industria en la que probablemente el equilibrio de poder no esta bien balanceado. Probablemente perjudicial para el farmacéutico.