Vuelven las mascarillas en exteriores, aunque con excepciones

El uso de mascarillas en exteriores volverá a ser obligatorio en España, así lo ha anunciado este miércoles el presidente del Gobierno al término de la Conferencia de Presidentes. La medida será aprobada este jueves en Consejo de Ministros para que entre en vigor a partir del próximo día 24.

Esta es una de las principales medidas con las que se ha saldado la conferencia telemática que han celebrado los jefes de Ejecutivo y que no ha incorporado las restricciones más duras que algunas comunidades reclamaban para hacer frente a la situación actual de la pandemia.

De hecho, el retorno de las mascarillas, que desapareciendo el pasado mes de junio por decisión del propio Pedro Sánchez, era una petición que habían mantenido hasta siete comunidades, pero que hasta el momento no había sido considerada por el Ministerio de Sanidad.

La vuelta de las mascarillas se hace con una serie de “salvedades”, ya que según ha indicado el presidente del Ejecutivo no serán obligatorias para practicar deportes al aire libre o estar en espacios naturales, como el monte o la playa, o en reuniones con la unidad familiar; además si en estas reuniones participan personas ajenas a la unidad familiar, como en las tradiciones reuniones navideñas y se puede garantizar una distancia de 1,5 metros tampoco será obligatorio.

El resto de medidas aprobadas no tocan ni cierres de establecimientos ni ninguna cuestión que pueda afectar, tanto a la economía o a la vida social. Otra cuestión serán las decisiones que puedan adoptar de forma individual los territorios, en función de su situación epidemiológica particular. Una situación que el pasado martes se volvía a incrementar en términos nacionales al batir el récord de casos notificados en un solo día; 49.823, según los datos del Ministerio de Sanidad. La incidencia acumulada por 100.000 habitantes sube 86 puntos y escala hasta los 700 casos.

Junto a las mascarillas, Sánchez ha asegurado que “se reforzarán los equipos de vacunación con efectivos del Ejército y se pondrá a disposición de las regiones la red sanitaria militar”. Igualmente, ha indicado la posibilidad de incorporar profesionales sanitarios, tanto jubilados, como titulados procedentes del marco exterior europeo, cuestión esta última que deberá valorar cada comunidad.

Igualmente, el presidente ha indicado que uno de los objetivos principales es el impulso la campaña de administración de la tercera dosis, en prevención, indicada ya en algunos estudios, que sólo dos pinchazos no son protección suficiente para frenar la expansión de la nueva variante ómicron.

De esta manera, el Ejecutivo se marca el objetivo, “de que de aquí y hasta finales de año, el 80% de la población entre 60 y 69 años tenga la dosis de refuerzo”, según explica Sánchez, que pone también como marca conseguir que ese  mismo porcentaje se alcance en la franja que va de los 50 a los 59 años, para el próximo el 24 de enero. El grupo de entre 40 y 49 años deberá estar vacunado al 80% para la primera semana de marzo.

En el caso de los niños de 11 años, la meta fijada es alcanzar un 70% con la primera dosis el próximo 7 de febrero y ese mismo umbral, pero con pauta completa, el 19 de abril.

El resto de propuestas de Sánchez han servido para reiterar los planteamientos ya esbozados en planes como el de Atención Primaria, de “reducir la temporalidad de los profesionales por debajo del 8%”. También ha confirmado lo anunciado por la ministra de Sanidad, Carolina Darias, este miércoles en el Congreso de permitir de forma temporal la venta en farmacias de las pruebas de uso profesional, así como el establecimiento de la validez a nueve meses del Certificado Covid, a partir del 1 de febrero, algo que ya anunció hace unos días la Comisión Europea.

Reacciones

Al término de la reunión, varios mandatarios autonómicos han mostrado su disconformidad con algunas de las decisiones que se han acordado.

Es el caso de Pere Aragonès, que reclamaba que las medidas que ya ha tomado Cataluña, como el toque de queda, se extendieran a todo el país. A su juicio, lo acordado en la Conferencia en cuanto a “son insuficientes” y “no responden a la gravedad de la situación”. El mismo argumento que ha utilizado el presidente vasco, Iñigo Urkullu, que abogaba por limitaciones hosteleras y limitaciones en aforos. “Las medidas aisladas no son efectivas”, ha asegurado después de ver cómo toda la batería de restricciones que había planteado el Gobierno vasco, no ha sido atendida. Entre estas medidas se encontraba la búsqueda de un marco legal que permita a las regiones tomar decisiones sin depender de los tribunales.

En otro sentido, pero también en contra de la disparidad de criterios, se ha mostrado el presidente andaluz, Juan Manuel Moreno, quien ha vuelto a reclamar la presencia de una norma básica estatal y ha reclamado al Gobierno de España que los acuerdos, especialmente en lo relativo a los fondos para blindar la Atención Primaria, sean vinculantes.

Una opinión diferente ha mantenido el presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla, quien ha celebrado “que no haya restricciones muy duras”. En su opinión, el cierre de establecimientos hosteleros, solamente contribuiría a “ahondar” la mala situación en la que se encuentran estos profesionales.

Similar opinión mantiene el presidente de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, que ha abogado por implementar "no invasivas" para contener la pandemia y se facilite el acceso a los test de antígenos.