Los dos partidos mayoritarios, PP y PSOE han coincidido este martes en el pleno del Congreso de los Diputados, a la hora de rechazar la toma en consideración de proposición de ley de Esquerra Republicana, para regular “de forma integral” el consumo de cannabis, lo que viene a significar la regulación tanto del uso terapéutico como recreativo.
Esta ya es la segunda ocasión en la que una iniciativa de este tipo es rechazada en lo que va de legislatura; la anterior fue presentada por Mas País, y quedará aún otra más, en esta ocasión diseñada por Podemos, que aún no ha presentado a debate a pesar de que la anunció hace seis meses.
Según ha defendido la diputada de la formación independentista, Marta Rosique, la iniciativa persigue “dar luz a una realidad”, como es la del uso del cannabis, así como el “fracaso” en la prohibición de la sustancia. “Cuando no hay ley, se impone la ley de la selva”, ha defendido Rosique.
El objetivo de la propuesta “no es incentivar su consumo, si no reducirlo”, la que “delimita el consumo de drogas en todas partes” (según la proposición los espacios para el consumo recreativo estarían limitados igual que para el tabaco) y “no legaliza el tráfico de drogas”.
Desde el PSOE se ha señalado que el uso terapéutico y el uso recreativo del cannabis “son dos debates distintos”, según el diputado Sancho Guardia, que asegura que mientras el “uso terapéutico ayuda a la calidad de vida de miles de pacientes”, “el otro está claro que no”.
En la bancada del PP se ha mantenido una actitud similar asegurando que en España “unas 600.000 personas tienen consumos problemáticos de esta sustancia”, según explica Eduardo Carazo. Vox tampoco está a favor de esta iniciativa que esconde, según Juan Luis Steegmann “intereses oscuros”, que buscan “lucrarse con la salud mental de los jóvenes”.
Frente a la posición de PSOE, PP y Vox, otra reside de partidos han mostrado su apoyo, como es el caso de Podemos que ha defendido que el actual enfoque “prohibicionista” actual es “ineficaz” y Ciudadanos, que por una vez ha hecho causa común con los independentistas catalanes para defender asegurando que “somos liberales, votamos a favor del individuo y su libertad”, en palabras de Guillermo Díaz.
Acompañamiento
La propuesta que sí ha salido adelante ha sido una proposición, en este caso no de ley, presentada por Más País, en la que se ha pedido la creación de permisos laborales, de hasta dos semanas, a los acompañantes de personas en riesgo de suicidio.
La medida, que ha contado con el apoyo de PSOE y Podemos, “es barata e inmediata ante un problema urgente", según indica Iñigo Errejón. PSOE y Podemos han supeditado su apoyo a la aceptación de una enmienda para que el permiso se extienda a una persona, que además debería acompañar durante todo el proceso y que además, este permiso fuera financiado de forma pública, para que el acompañante no tenga que renunciar a su salario.
Desde el PP, Rosa Romero ha indicado el parecer favorable de su partido a esta medida, pero no a la iniciativa presentada, que considera “poco rigurosa” y “con importantes lagunas”. No se indica, entre otras cuestiones los criterios temporales, quién debe autorizar los permisos y ausencia total del planteamiento que realizan los profesionales. Esta propuesta “es empezar la casa por el tejado”, ha indicado Romero, quien ve precisa la creación de un plan integral de acompañamiento.