Terapéutica

Los efectos secundarios, también son cuestión de género

Investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid demuestran que existen diferencias entre el número de efectos adversos que sufren hombres y mujeres al tomar un mismo fármaco, siendo generalmente mayor en el género femenino.

En este contexto, un estudio, dirigido por Alejandro Rodríguez González, catedrático de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Informáticos de UPM , Belén Otero Carrasco, investigadora del Centro de Tecnología Biomédica (CTB) de la UPM, y Aurora Pérez Pérez, profesora de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Informáticos de UPM, se ha centrado en investigar el reposicionamiento bajo una perspectiva de género con el objetivo de comprobar si existen diferencias en el número de efectos secundarios que sufren hombres y mujeres al tomar un mismo fármaco reposicionado.

El estudio se ha realizado en el marco del proyecto Disnet, que tiene como objetivo proveer mecanismos para mejorar y ampliar el conocimiento sobre las enfermedades, que ayuden a entender las relaciones entreellas, así como al reposicionamiento de fármacos mediante la integración de datos biomédicos a gran escala. Este proyecto está dirigido por el catedrático de la UPM, Alejandro Rodríguez González, y financiado por el Ministerio de Ciencia e Innovación y por la Comunidad de Madrid.

Medicina más eficiente

Los investigadores recogieron información de diferentes fuentes y consiguieron un conjunto de casos de reposicionamiento de fármacos, el porcentaje de efectos adversos que dichos fármacos producen en cada género y la prevalencia mundial por género de las enfermedades contempladas en los casos de reposicionamiento del estudio. En primer lugar, se analizó si alguno de los géneros presentaba un mayor número de efectos adversos que el otro al tomar el mismo medicamento. En segundo lugar, se contempló también la prevalencia, analizando los casos para los que el género que presentaba mayor porcentaje de efectos secundarios al tomar un fármaco determinado no era el género que tenía la mayor prevalencia para la enfermedad tratada con dicho fármaco.

Los resultados del estudio mostraron que existe una diferencia significativa entre los efectos secundarios observados en las mujeres en comparación con los observados en los hombres cuando toman el mismo medicamento. Ello indica la necesidad e importancia de contemplar la variable de género a la hora de reposicionar un nuevo fármaco. Por tanto, en las estrategias de reposicionamiento, se deben considerar los posibles efectos adversos que un medicamento puede llegar a tener en cada uno de los géneros y tener en cuenta la prevalencia de la enfermedad. Esto puede ayudar a reducir el número de fármacos retirados del mercado por causar efectos adversos importantes en alguno de los dos géneros, así como a reducir el número total de ocurrencias de efectos adversos.

Asimismo, destacan que la reutilización de fármacos conlleva un gran ahorro en términos económicos y temporales, haciendo posible que el tratamiento esté disponible para el paciente en un plazo mucho más corto, con mayor seguridad y a un menor coste. Por este motivo, consideran de gran importancia introducir el concepto de perspectiva de género en este campo.

A partir de los resultados obtenidos en este primer estudio, la línea futura en la que trabajan estos investigadores se basa en buscar una medicina más personalizada donde se conozca qué fármacos son los más adecuados para cada género.

Comentarios

guest
0 Comments
Inline Feedbacks
View all comments

Noticias relacionadas

Actividades destacadas