Profesión

Las farmacias cordobesas y el H. Reina Sofía colaboran en prevenir la enfermedad renal

Aportarán información en interrelación entre las enfermedades de riñón y corazón, insistiendo en cuestiones como que la diabetes, presión arterial alta y las enfermedades vasculares son las principales causas prevenibles de  enfermedad renal crónica, la cual afecta ya a un 15% de la población en España

El Colegio de Farmacéuticos de Córdoba y el Servicio de Nefrología del Hospital Universitario Reina Sofía colaborarán para facilitar la promoción de consejos, recomendaciones e información sobre las enfermedades renales, que serán difundidos en las farmacias comunitarias de toda la provincia.

La iniciativa, realizada en correlación a la celebración del Día Mundial del Riñón, que tiene lugar el próximo jueves, tiene por objetivo fomentar el cuidado de la salud renal entre los  cordobeses, promoviendo entre los pacientes y usuarios de farmacia consejos sobre la  importancia de cuidar los riñones y prevenir enfermedades renales y, de este modo,  también “evitar otros problemas cardiovasculares asociados, ya que el trastorno agudo o crónico de uno de estos órganos puede inducir a una disfunción en el otro”, según informan desde el colegio.

Para el presidente del Colegio de Farmacéuticos de Córdoba, Rafael Casaño, “las farmacias cordobesas podemos aportar mucho en la educación para la salud de la población, y este es un buen ejemplo de ello. Por su capilaridad, cercanía y accesibilidad, así como por la capacitación de sus profesionales farmacéuticos, las farmacias juegan un papel importante para ayudar a concienciar sobre la importancia y prevención de patologías como la enfermedad renal crónica, que se conoce la ‘epidemia silenciosa’, y que es una enfermedad muy desconocida para la ciudadanía en general, pero con gran impacto en la salud y calidad de vida de los afectados.

Además, ha señalado, “estamos encantados de colaborar con los compañeros nefrólogos del Hospital Reina Sofía”, ha destacado.

Por su parte, la jefa de Servicio de Nefrología del hospitalario cordobés, Sagrario Soriano, ha subrayado “la importancia de la colaboración entre distintos niveles asistenciales sanitarios para materializar campañas informativas y de visibilidad de enfermedades que sirvan para fomentar un mayor conocimiento y prevención”.

Asimismo, ha destacado “el papel que los farmacéuticos tienen a la hora de transmitir consejos e información generales a la población, como espacio cercano en cada barrio o pueblo, en  este caso sobre la patología renal, que han sido consensuados con nuestro servicio”.

“Pueden desempeñar también un papel activo en cuestiones como la adherencia a los tratamientos de los pacientes renales, en la prevención de posibles interacciones entre los tratamientos o fármacos, o en el fomento de hábitos de vida saludable, como mejor manera de prevenir problemas renales o cardiovasculares asociados”, ha añadido.

Los materiales que se distribuirán se enmarcan en la iniciativa ‘Cuida tu riñón y te lo agradecerá tu corazón’, en la que el Colegio de Farmacéuticos de Córdoba y el Servicio de Nefrología del Hospital Universitario Reina Sofía vienen colaborando en los últimos  años. Desde la farmacia se promoverá entre la población que se compruebe su función renal si se cuentan con factores de riesgo cardiovascular (diabetes, hipertensión, obesidad) o antecedentes de historia familiar de enfermedad renal. Esto se puede realizar con un análisis de sangre u orina, que permiten detectar alguna alteración en este sentido, ya que, esta patología no muestra signos ni síntomas en sus estadios iniciales. Para ello, los farmacéuticos también están recibiendo formación e información sobre salud renal a través de cursos del programa NodoFarma Asistencial, con el objetivo de ampliar sus conocimientos y ofrecer una mejor ayuda y apoyo a los pacientes y sus familiares.

Igualmente, desde las farmacias cordobesas se ofrecerán consejos de fácil cumplimiento para cuidar el riñón, entre los que destacan algunos como evitar el sobrepeso y la obesidad con una dieta saludable y ejercicio físico regular, controlar la presión arterial y el nivel de glucosa y de lípidos (colesterol, triglicérido) en sangre; o mantener una ingesta de líquidos adecuada. Asimismo, se recomienda no fumar, no automedicarse, e informar al médico o al farmacéutico si se tiene la función renal deteriorada.

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