Un organismo independiente de evaluación, base para la sostenibilidad sanitaria

El Círculo de Empresarios ha publicado el documento ‘UNA Sanidad centrada en las personas’ en el que abogan por el impulso de la colaboración público privada como bases para mejorar la calidad y la eficiencia de los servicios de salud. Esta entidad, formula una serie de recomendaciones en base a un nuevo paradigma de colaboración público-privada entre las que destacan desarrollar un Acuerdo general por la Sanidad y la creación de un Organismo Independiente de Evaluación y Excelencia con una gobernanza basada en la seguridad jurídica, la transparencia y la rendición de cuentas.

El objetivo que plantean los expertos es que la sanidad aproveche las fortalezas tanto del sector público como del privado, ampliando el acceso a la atención médica y mejorando la eficiencia y la calidad de los servicios de salud. El documento, que ha contado con la colaboración de EY, lo han presentado la vicepresidenta del Círculo y presidenta de Cariotipo, Carmen Mateo, y el presidente del grupo de trabajo de Sanidad y presidente de Ellis & Partners, Pedro J. Nieto, en el transcurso de una sesión celebrada en el Auditorio Pérez-Llorca.

Según explican, en un momento en que el Gobierno está promoviendo reformas en la Sanidad y la Unión Europeaimpulsa cambios legislativos, el Círculo ha considerado oportuno hacer un análisis de la realidad actual.

Esta se encuentra “marcada por el envejecimiento de la población y el aumento en la prevalencia de enfermedades crónicas que amenaza con sobrecargar el presupuesto sanitario nacional y su sostenibilidad financiera”. Una situación que “tiene un impacto directo en la sanidad, afectando así la calidad de la atención al paciente y la calidad de vida de la población”.

El Documento busca ofrecer soluciones y medidas para “convertir España en un país de excelencia sanitaria mediante el fortalecimiento de la colaboración público-privada como gran herramienta para reforzar el sistema sanitario y profundizar en sus avances, así como habilitar fórmulas entre actores públicos y privados para compartir costes de inversión y riesgos, además de mejorar la calidad asistencial del paciente”. Todo ello “sin olvidar el apoyo necesario a la atención primaria, organización clave en el sistema sanitario, mediante la provisión de personal cualificado y convenientemente retribuido y con la estabilidad laboral precisa”.