Los principales partidos políticos del arco parlamentario se han mostrado dispuestos a analizar cambios en la retribución de la farmacia, incluyendo un nuevo modelo retributivo, que permita asegurar la viabilidad de la farmacia rural.
Todos los partidos explicaron durante su participación en el I Foro ‘Conversaciones sobre botica’ organizado por la Sociedad Española de Farmacia Rural (Sefar) que el mantenimiento de la farmacia del ámbito rural es algo necesario en un modelo como el español.
El primero en centrar el asunto fue el portavoz del PSOE en el Senado, José Martínez Olmos, que reclamó una estrategia para el ámbito rural, en general, lo que podría ayudar a esas farmacias. Además, puso encima de la mesa una dosis de pragmatismo al señalar que cualquier cambio que se hiciera, había que hacerlo con cuidado y consenso con el sector ya que afectaría a toda la profesión.
En este sentido, consideró difícil asumir la propuesta realizada por el presidente de Sefar, Francisco Javier Guerrero, de asegurar a las farmacias rurales la cobertura económica de los gastos fijos, así como el salario de un farmacéutico de Atención Primaria para el profesional.
Guerrero también explicó que las farmacias rurales son el 4,5% del total y “solo consumen el 1% de los recursos” ya que la facturación estándar “es de un 88,5% inferior a la media”.
Según el presidente de Sefar, actualmente se dedica a las farmacias de Viabilidad Económica Comprometida (VEC) un 1% de las aportaciones que la botica realiza por el Real Decreto-ley 5/2000. Su propuesta es destinar el 1,5%, con lo que, según Guerrero, “se solucionaría la sostenibilidad de las farmacias y se podrían incluso poner en marcha servicios”.
El secretario ejecutivo de Sanidad del PP, José Ignacio Echániz, explicó que sería necesario “que diseñar un nuevo modelo de pago de la prestación farmacéutica” puesto que hay que “evitar que las farmacias tengan que cerrar, porque eso sería malo para los paciente, los pueblos rurales, etc.”
Por su parte, el representante de Izquierda Unida, José Andrés Llamas, indicó que ellos consideran necesario “depender menos del pago por acto e ir al pago por servicio”. La representante de Podemos, Ana Castaño, reclamó “desmercantilizar” la farmacia y “dar más peso a lo sanitario” avanzando en el pago por servicio. Por su parte, Fernando Navarro, portavoz adjunto de Ciudadanos en la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados, se mostró dispuesto a buscar un consenso en el ámbito del modelo retributivo de la farmacia.
Con todo, Martínez Olmos señaló que no es realista pensar en un modelo que requiera de más recursos. Los 2.500 millones que cuesta la oficina de farmacia se podrán redistribuir pagando por servicios, en el marco de un modelo retributivo diferente, explicó, pero reiteró que “no es realista pensar en un incremento de gasto, y tiene que ser pactado con el conjunto del sector”