Las últimas legislaturas de las Cortes Generales han visto cómo se ha intentado alcanzar un Pacto por la Sanidad. No obstante, la próxima legislatura, por la fragmentación previsible del Parlamento, la polarización y el excesivo partidismo en las posiciones, no parece aventurar que pueda alcanzarse un acuerdo que fructifique como un Pacto por la Sanidad.
Así se desprende de las intervenciones que los portavoces de PP, PSOE y Podemos en el Congreso de los Diputados, Rubén Moreno, Jesús María Fernández y Amparo Botejara, en el encuentro celebrado este lunes en la sede del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (CGCOF), del II ciclo del Pacto de Estado por la Sanidad de la Asociación Española de Derecho Farmacéutico (Asedef).
El anfitrión del encuentro, el presidente del CGCOF, Jesús Aguilar, aprovechó sus palabras de bienvenida para poner en valor el papel de la farmacia comunitaria en el seguimiento farmacoterapéutico, la adherencia y la conciliación de la medicación. También reclamó el regreso de los medicamentos innovadores a la farmacia, así como aprovechar las nuevas tecnologías para que las farmacias puedan acceder a la historia farmacoterapéutica. En este sentido, consideró a las farmacias como un “ejemplo de transformación digital”.
Por último, y en relación a los últimos conflictos con enfermería, Aguilar quiso dejar claro que “contar con la red de farmacias no es privatizar nada”. Según él, “es aprovechar el potencial de una infraestructura con más de 22.000 establecimientos sanitarios”.
También participó en la presentación el viceconsejero de Sanidad de Madrid, Fernando Prados, quien puso el foco en la necesidad de alcanzar la sostenibilidad del sistema. Para ello, aseguró que serán necesarias “acciones decididas”. Como valoración política quiso dejar claro que “no hay que confundir nuevas formas de gestión con recortes” y reclamó un Pacto por la Sanidad que incluya a todos los agentes, incluida la industria.
El encuentro, que fue moderado por el ex presidente de la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados, tenía prevista la participación de Francisco Igea, portavoz de Ciudadanos y Joseba Agirretxea, del PNV, que no pudieron acudir a la cita.
El portavoz del PP consideró que parece lógico que haya que reformar el Sistema Nacional de Salud (SNS) “ya que si se queda estático y sin reformas no va a dar las respuestas que se necesitan” en un entorno cambiante. A este respecto, consideró que estas reformas requieren de consensos políticos y social, por lo que reclamó apoyo a los medios de comunicación para sacar del debate “partidario y partidista” a la Sanidad.
Fragmentación política y beligerancia
Moreno consideró que los partidos están cada vez “más fragmentados y beligerantes” por lo que vio difícil la posibilidad de alcanzar el Pacto por la Sanidad. No obstante, sí que vio oportunidades de alcanzar acuerdos sobre aspectos concretos. En este sentido citó a las personas, tanto pacientes, que deben ser responsables con el autocuidado y tener claro que “es un derecho, pero hay obligaciones”. En cuanto a los profesionales, apuntó que es necesario avanzar en materia de salarios iguales en todo el SNS y políticas de incentivos según “valía y dedicación al sistema”.
Además de esto, el representante del PP considera necesario incrementar la financiación y avanzar hacia la concentración de servicios. A este respecto Moreno ha querido trasladar que “va a haber que concentrar servicios”, por lo que “no todas las CCAA van a tener los mismos servicios e incluso habrá que comprar al sector privado”.
Con respecto a la farmacia ha puesto de manifiesto la necesidad de seguir defendiendo el modelo y con respecto a los medicamentos, explicó que el Plan de Hepatitis C es la acción de la que es responsable político de la que se siente “más orgulloso”. Por ese motivo, recordó que el SNS va a tener que ocuparse de la medicina personalizada y de precisión ya que si no “nos va a arrollar”.
Por su parte, el portavoz del PSOE coincidió con Moreno en que la situación política no es propicia para un pacto. “El entorno es hostil y cada vez se hace más difícil”, aseguró. Al igual que el portavoz del PP también criticó el papel de los medios de comunicación, ya que “parece que estamos en guerra”, si bien salvó de esa situación a los medios especializados.
Continuidad legislativa y consensos
Fernández explicó que en Sanidad hay una amplia continuidad regulatoria y señaló el amplio consenso que suele presidir la toma de decisiones sanitarias. Según él, la mayor parte de las leyes han tenido acuerdo y “en caso de cambios de Gobierno no se han sustituido”, si bien señaló la excepción del Real Decreto-ley 16/2012 que modificó la Ley de Cohesión de 2003, norma impulsada también por el PP.
En relación a los consensos alcanzados en esta legislatura que acaba, Fernández expuso que de 123 proposiciones no de ley (PNL) debatidas en la Comisión de Sanidad se han aprobado 115 y solo se han rechazado ocho.
En lo que se refiere a la posibilidad de pactos, Fernández también consideró que hay una serie de pactos puntuales que son “necesarios”. A este respecto citó la financiación sanitaria, para determinar “cuánto es la suficiencia del SNS, cómo se financia, como se reparte y mecanismos de compensación”. También quiso resaltar la necesidad de pactar en relación a las profesiones sanitarias, para lo que pidió un “acuerdo de luces largas”.
Otro aspecto en el que incidió el portavoz socialista es en la necesidad de dotar al Consejo Interterritorial del SNS de “más músculo técnico”. En este sentido, consideró que el problema del CISNS no es su reglamento, sino que necesitamos entidades como un “centro nacional de Salud Pública, una agencia de Calidad de Resultados, una agencia para abordar la revolución técnica y digital…”.
En cuanto a la financiación, Fernández consideró difícil continuar siendo la “primera sanidad del mundo” con una inversión pública del 5,8% sobre el PIB. Por ese motivo, consideró necesario “decidir cuánto vamos a gastar y cómo lo vamos a hacer” y explicó que habría que modificar la fiscalidad para acercar los ingresos a los de otros países.
Gestionar desde el sector público
La portavoz de Podemos, por su parte, puso el foco en que es posible una gestión sanitaria de calidad, ámbito en el que hay discrepancias entre los bloques de izquierda y derecha. Botejara puso como ejemplo de gestión a la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), que es “referencia mundial” y se gestiona directamente desde el sector público.
Botejara también reclamó un mayor papel de la Atención Primaria para que sea “el eje vertebrador”. Además, criticó algunos aspectos de la farmacia comunitaria y aseguró que algunas de sus funciones “se solapan con las de enfermería”.
Por otro lado, la diputada de Podemos también se mostró disconforme con la evolución que está teniendo en nuestro país la sanidad privada. Según ella, “se está favoreciendo que el sistema vaya hacia un doble aseguramiento y una beneficencia como final del camino”.
Las críticas de Botejara también llegaron al ámbito del medicamento. Criticó sus precios y los diferenciales existentes entre países y, a este respecto, anunció que están realizando un estudio para determinar la relación entre el coste de investigación y los precios de los medicamentos.
La portavoz de Podemos también realizó una crítica a la financiación autonómica y las diferencias que se producen entre regiones en término de gasto per cápita.