Cada cambio de Gobierno o nombramiento de ministro de Sanidad se acompaña de una nueva presión liberalizadora por parte de diversas entidades conocedoras de que la decisión no puede ser más que local. Y eso es lo que parece que ha podido ocurrir ahora mismo con la propuesta del Fondo Monetario Internacional (FMI) de liberalización de sectores profesionales que ha realizado este martes. Así al menos lo ve el portavoz del PSOE en la Comisión de Sanidad del Senado, José Martínez Olmos, que considera que "cada vez que hay un cambio de Gobierno, una legislatura nueva, arrecian las presiones liberalizadoras".
Martínez Olmos tiene claro que "el modelo de farmacia funciona" y, además, la liberalización no produciría ahorros para el sistema público dado que los precios de los medicamentos se establecen por el Ministerio de Sanidad. "Es una medida que no produce ahorros ni más eficiencia", señala. A pesar de ello, lamenta que sigue siendo receta habitual del FMI y de la Comisión Europea.
Otra receta habitual de 'los hombres de negro' es la reducción del gasto sanitario, como han vuelto a proponer en su último informe. Martínez Olmos lo rechaza de plano. "Pondría en riesgo el sistema tal y como lo tenemos". De hecho, el portavoz socialista recuerda que el SNS presenta actualmente "un déficit que se sitúa en el entorno de los 7.000 millones de euros anuales. Y si no se ha roto del todo la costura es porque se paga proveedores con el préstamo bancario del FLA", explica. Por todo ello, según Martínez Olmos "el FMI se mete donde no debe, y sin conocer cómo es nuestro sistema sanitaria".
"Es un atrevimiento y nuestra posición es exigir al Gobierno de España que rectifique la política que está siguiendo y que en este tema no siga los consejos del FMI". El ex secretario general de Sanidad considera que "las exigencias del Gobierno Central a las comunidades autónomas para gastar cada vez menos que impone el gobierno de España hace que se produzcan estas diferencias entre ellas".
Por ese motivo, desde el PSOE consideran que un gasto en el entorno del 6,5% del PIB "es asumible para un país como España". Por ese motivo, lo que hay que hacer según Martínez Olmos es "alzar la voz y decir no; tenemos que decir que podemos gestionar bien y gastar niveles razonables en función del PIB en torno a las 6,5%, que es lo que necesita ahora España". Según explica, no es ni un punto más de lo que se destina a Sanidad ahora mismo.
Además, el representante socialista se muestra molesto por el hecho de que los organismos internacionales "vengan a favorecer que haya un escenario favorable para el sector privado, que en el fondo es lo que defienden". Según él, el sector privado debe tener su espacio "pero no a costa de la sanidad pública y de que no cubra las necesidades que deben asegurarse con respecto al nivel económico de este país"