La Federación Española de Asociaciones de Anticoagulados (Feasan) ha lanzado, con motivo del Día Nacional del Paciente Anticoagulado, una campaña informativa bajo el lema 'Tómatelo en serio', con el fin de informar sobre la medicación, sus efectos y sus riesgos. Y es que, explica Luciano Arochena, presidente de Feasan, "hay pacientes que no saben por qué toman este tratamiento y carecen de información sobre el efecto que éste tiene en su organismo, lo que supone un riesgo en sí mismo". Por eso, subraya Arochena, "es clave que los pacientes conozcan los efectos de su tratamiento para identificarse como anticoagulados, por ejemplo, ante una emergencia médica y, en general, ante un profesional sanitario". Además, prosigue, esa información les hace "sentirse más seguros ya que son capaces de prevenir posibles complicaciones".
La campaña recoge una serie de recomendaciones para que los pacientes sean más responsables. Por un lado, sobre la forma en la que hay que tomar el anticoagulante (cada día a la misma hora). También aconsejan llevar una dieta equilibrada y saludable, acudir a los controles, practicar ejercicio de forma regular, consultar antes de tomar cualquier nuevo tratamiento (incluidos los de herbolario), acudir al centro de salud ante un fuerte golpe y siempre identificarse como anticoagulado.
Y para transmitir todos estos mensajes, desde Feasan han querido destacar la labor de los profesionales sanitarios, que se tienen que "asegurar que los pacientes disponen de toda la información necesaria" para que puedan participar de forma activa "en la toma de decisiones de su salud".
Sobre la equidad en el acceso
Aprovechando el lanzamiento de esta campaña, Feasan ha instado a las administraciones sanitarias a acabar con las desigualdades en el acceso a los nuevos tratamientos, incorporar el autocontrol domiciliario como método de control eficaz y mejorar el control de los pacientes. "Aunque la ley exige que el paciente reciba el mejor tratamiento disponible, en anticoagulación eso no se cumple en demasiados casos y lo peor es que muchos pacientes viven ajenos a ello. Depende de cada comunidad autónoma, desde las que ponen barreras burocráticas que no responden a criterios clínicos hasta las que todavía no han derivado totalmente el seguimiento del paciente a atención primaria, lo que lleva a un cuello de botella en los especialistas de hematología", afirman.
Asimismo, han solicitado que los anticoagulantes de acción directa, que también están indicados para el tratamiento de la enfermedad tromboembólica venosa (ETV), "sean financiados por el SNS" (actualmente su coste debe asumirlo el paciente si se lo receta su hematólogo), ya que, dicen, "existe un grupo de pacientes para los que son la mejor opción terapéutica para garantizarles un buen control". También han pedido incluir el sistema de autocontrol del tratamiento anticoagulante oral en la cartera de servicios del Sistema Nacional de Salud, porque, opinan, "es un método coste-efectivo que aporta seguridad y autonomía al paciente".