Seis sociedades científicas médicas han reclamado que se estudie la posibilidad de que determinadas “farmacias autorizadas” puedan vacunar contra la gripe, como parte de la estrategia que busca incrementar las tasas de cobertura así como la oferta de vacunación antigripal para la población general.
El ‘Documento de actualización y reflexión sobre la vacunación antigripal en España’ (acceder al documento), elaborado por la Sociedad Española de médicos de Atención Primaria (Semergen); la Asociación Española de Vacunología (AEV); la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG); la Asociación Española de Pediatría (AEP); la Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública e Higiene y la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG), aboga también por que es “importante informar y formar a los profesionales sanitarios, incluidos los farmacéuticos, sobre la gripe y sus complicaciones y sobre la manera de prevenirlas mediante la vacuna”. A este respecto, reclaman como “útil” implementar programas de incentivos entre estos profesionales “para que se vacunaran y recomendaran la vacunación”.
El documento también enumera diversas estrategias para incrementar la vacunación de la gripe tanto para la población general como para los grupos de riesgo y muy especialmente a los propios profesionales. En este sentido, reclaman “implementar campañas de información y formación sobre la gripe, sus complicaciones (no subestimar la enfermedad) y la efectividad y seguridad vacunal, dirigidas tanto a la población general (especialmente a los grupos de riesgo) como a los profesionales sanitarios”, garantizar “un fácil acceso a la vacunación: asegurar la disponibilidad de las vacunas; vacunar en las consultas a demanda y oportunista”.
Además, se reclama implicar a las asociaciones de pacientes y utilizar a los medios de comunicación para incrementar la información veraz que llega a los pacientes. Por otro lado, se pide alas consejerías de Sanidad que comuniquen de manera eficaz el interés por “adquirir nuevas y mejores vacunas contra la gripe, con el fin de mejorar la percepción por parte de la población general sobre la efectividad de la vacunación antigripal”.
En cuanto a las estrategias dirigidas a grupos concretos, destacan los dirigida específicamente a las mujeres embarazadas de cara a concienciar “sobre la protección que la vacuna brinda al feto y al neonato”.
El foco sobre los profesionales
Por su parte, de cara a los sanitarios, consideran necesario “impartir formación reglada y cíclica a los trabajadores sanitarios sobre la gripe y la importancia de vacunarse durante la campaña” así como “incluir el concepto de que la vacunación es un aspecto más de la seguridad y salud en el trabajo”. Por ese motivo, consideran que la vacunación es especialmente importante en las unidades hospitalarias con pacientes de muy alto riesgo (UCI, maternidad, pediatría-neonatología, oncología, inmunodeprimidos, etcétera), llegando incluso a que “sea obligatoria” la vacunación de los profesionales que atienden a estos pacientes.
Además, el documento enumera hasta seis grupos de personas que a las que se debería extender la recomendación de vacunación de la gripe estacional anualmente: personas mayores, a partir de los 60 años; personas que convivan en instituciones cerradas o semicerradas (por ejemplo, residencias o colegios mayores); personal a cargo de grupos numerosos en entornos cerrados o semicerrados (por ejemplo, tripulaciones aéreas o tripulaciones marítimas); personal docente de cualquier nivel educativo; toxicómanos, especialmente consumidores por vía intravenosa; viajeros.
Adicionalmente, según los resultados de pruebas realizadas en otros países, también consideran que es preciso iniciar un debate y estudio sobre la idoneidad de vacunar a los niños sanos sin contraindicaciones, a partir de los 6 meses de edad.