El Observatorio Nacional de Prácticas Seguras en el manejo de Medicamentos Peligrosos ya es una realidad. La Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH) ya incluye un enlace en su web, a través del cual será posible que los hospitales españoles hagan una evaluación de sus prácticas en lo que respecta a la gestión de los medicamentos peligrosos.
El objetivo de esta iniciativa, dirigida por los jefes de Servicio de Farmacia de los hospitales de Son Espases (Palma de Mallorca), y La Fe (Valencia), Olga Delgado y José Luis Poveda, respectivamente, es el de permitir al centro en cuestión "conocer su grado de cumplimiento en el manejo de medicamentos y/o productos peligrosos (MPP) con las recomendaciones y estándares recogidos en las principales guías nacionales e internacionales". Entre esos estándares establecidos por la 'Guía de buenas prácticas para trabajadores profesionalmente expuestos a agentes citostáticos', la Escuela Nacional de Medicina del Trabajo, el Instituto de Salud Carlos III, el Ministerio de Economía y Competitividad, las monografías de Farmacia Hospitalaria y Atención Primaria 'Medicamentos peligrosos', 'NIOSH Alert', y 'ISOPP Standards of Practice Safe Handling of Cytotoxics', así como las de la European Society of Oncology Pharmacy, o las USP 800. También lo recogido en la Nota Técnica de prevención 'Medicamentos Peligrosos. Medidas de prevención para su preparación y administración'.
Seguidamente, se exponen una serie de instrucciones para llevar a cabo la evaluación. En este sentido, se recomienda que el cuestionario se responda "por un equipo multidisciplinar y no de forma individual". De ese equipo deben formar parte el Servicio de Farmacia, Enfermería/técnicos de Farmacia, Enfermería de Planta y/o Hospital de Día, el Servicio de Prevención de Riesgos Laborales, el Departamento de Calidad y/o Seguridad, y el Servicio de Limpieza. "Las respuestas se deben dar de forma consensuada por el equipo", concluyen.
Aspectos incluidos en el cuestionario
El cuestionario incluye aspectos de tipo de demográfico, como el número aproximado de dosis de medicamentos/productos peligrosos (MPP) que prepara anualmente el centro en cuestión, así como el número aproximado de dosis administradas anualmente, diferenciando, en ambos casos, entre los estériles y los no estériles. Seguidamente, los responsables de cumplimentar la prueba tendrán que atender a cuestiones relacionadas con medidas generales, y otras asociadas, de forma específica, con la recepción, desembalaje, reetiquetado, almacenamiento y transporte, por un lado, y con el reenvasado, contaje y acondicionamiento, por otro.
También tendrán que responder a preguntas adicionales sobre la prescripción, la elaboración de fórmulas magistrales, la preparación, la administración, la limpieza, y la formación, tanto a profesionales, como a pacientes y cuidadores. A partir de ahí, podrán acceder a la autoevaluación, donde podrán comprobar el grado de cumplimiento de los estándares previamente mencionados. De esta forma, tendrán allanado el camino para poder mejorar en la gestión de estos productos poniendo en marcha las medidas adecuadas.