CofmS31, la sociedad mercantil del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid, ha organizado, en el marco de su Aula de Formación, una charla titulada ‘Responsabilidad Civil Profesional Sanitaria, riesgos y reclamaciones en oficina de farmacia', en la que se han analizado los riesgos derivados de la actividad que se lleva a cabo dentro de las oficinas de farmacias, tanto en la dispensación de medicamentos como en otras acciones.
En lo que respecta a la dispensación, Ignacio Megía, director de Siniestros y Asesoría Jurídica de Berkley España, subrayó la importancia de que el profesional farmacéutico conozca cuáles son sus responsabilidades para evitar cometer infracciones o errores que les obliguen a hacer frente a reclamaciones /administrativas, civiles o penales por los daños causados al paciente. "La dispensación comprende las actividades llevadas a cabo bajo supervisión de un farmacéutico, desde que se recibe una prescripción o una petición de un medicamento hasta que éste es entregado al paciente o al profesional responsable de su administración", la cual conlleva, entre otras cosas, la transmisión de "información acerca de cómo preparar la medicación, forma de su conservación, riesgos de incumplimiento en su administración y las precauciones especiales a adoptar en casos concretos”.
En este punto, citó algunos casos en los que el farmacéutico quedaría expuesto a la apertura de un proceso (administrativo, civil o penal), como serían la conservación de fármacos de forma inadecuada, caducados o retirados por la autoridad sanitaria; proporcionar medicamentos sin la preceptiva receta médica; realizar una sustitución no autorizada; llevar a cabo una mala praxis al asesorar al paciente en casos de medicamentos no sujetos a prescripción médica; dispensar fármacos defectuosos por fórmulas magistrales incorrectamente elaboradas; infringir los límites del consejo farmacéutico; vulnerar la confidencialidad sobre datos de salud del paciente; realizar publicidad engañosa sobre productos sanitarios o competencia desleal; o, por ejemplo, llevar a cabo la venta ambulante o por internet de medicamentos sin receta.
Tras exponer los riesgos, la jornada sirvió para que el responsable del Departamento de Asegura Consultoría de CofmS31, Luis Manuel Martín, resaltara la importancia de que los profesionales cuenten con una buena cobertura para hacer frente a las posibles reclamaciones derivadas de su labor en la farmacia, y recomendó disponer siempre de un seguro de responsabilidad civil profesional sanitaria “que asegure su tranquilidad frente a posibles reclamaciones en el ejercicio de su trabajo”.
Martín recomendó un seguro que cubra el máximo de actividades que realiza la farmacia; que se haga cargo de la defensa del asegurado en procedimientos civiles y penales (asuntos dolosos-presunción de inocencia, pérdida de prestigio, agresiones…); que facilite abogado, procurador y perito; o que se haga cargo de constitución de fianzas, costas y gastos judiciales.
