La Sociedad Española de Directivos de la Salud (Sedisa) celebró un debate previo a las elecciones generales del próximo 28 de abril, en el que participaron Eduardo Raboso, portavoz de Sanidad del PP en la Asamblea de Madrid, José Manuel Freire, su homólogo en el PSOE, Enrique Veloso, que ejerce la misma función en el Grupo Ciudadanos, y Mónica García, que en la última legislatura ha hecho lo propio en Podemos, y que forma parte ahora de la candidatura de Más Madrid, formación liderada por Íñigo Errejón. En este debate, los representantes de los principales partidos han ofrecido sus propuestas en relación, entre otros aspectos, con la gestión de la innovación farmacéutica, un ámbito en el que parece que hay convergencia sobre la necesidad de avanzar en modelos de precios basado en el valor.
Inició este bloque el portavoz socialista, quien puso en valor la creación del Comité Asesor para la Financiación de la Prestación Farmacéutica del SNS y propuso el impulso de un plan nacional para explotar a fondo los datos que genera el sistema sanitario en relación con la innovación terapéutica. Para Freire, es fundamental, concretamente, conocer los resultados clínicos y la experiencia que viven los pacientes, con instrumentos como PROMs (Patient Reported Outcomes Measures) y PREMs (Patient Reported Experience Measures). En el apartado de las compras, defendió la necesidad de revisar la Ley de Contratos del Sector Público de 2017, desde la perspectiva de las necesidades de una gestión eficiente y ágil en los hospitales del SNS, así como avanzar en la compra centralizada.
Por su parte, Raboso subrayó, también, la importancia de evaluar la innovación teniendo en cuenta el resultado clínico, además de alabar el papel que desempeña la industria farmacéutica, a la que reconoció su liderazgo como sector dinámico e innovador.
En relación con la innovación terapéutica, la representante de Más Madrid hizo referencia, también, a impulsar el pago por resultados y los acuerdos de riesgo compartido, pero añadió la necesidad de que todos los acuerdos a los que se llegue con la industria sean transparentes. Como Freire, además, llamó a una mayor correspondencia entre las normas de contratación pública y las necesidades reales del sector sanitario.
Finalmente, el representante de Ciudadanos incidió en la idea de crear un sistema de precios que esté basado en el valor terapéutico de las innovaciones y huyendo siempre del electoralismo. En su opinión, además, el proceso para la incorporación de éstas debe ser ordenado, basado en la potenciación de la red de agencias de evaluación, con la difusión de sus informes de modo que ayuden a orientar la toma de decisiones. También planteó una mayor flexibilización en la aplicación de las normas de contratación que ayude a invertir, pero también a desinvertir.
Otras cuestiones
Durante el debate, los portavoces políticos también abordaron otros temas de gran interés, como son la financiación y el modelo de gestión. En materia de financiación, coincidieron, de alguna u otra manera, en la necesidad de disponer de unos presupuestos más ajustados a las necesidades en salud, aunque, por un lado, el representante del PP abogó por revitalizar la economía para obtener más recursos con los que nutrir la sanidad, mientras que PSOE y Podemos defendieron su postura de que el incremento de fondos para la sanidad debe venir más bien por la vía fiscal. Ciudadanos puso el énfasis en el reparto de los fondos a las CCAA, que consideran injusto.
En lo que respecta a los modelos de gestión, Raboso confirió un valor importante a la sanidad privada, como complemento a la sanidad pública, mientras que Freire llamó, más bien, a que la pública copie algunos de los aspectos que funcionan bien en la privada, Veloso a considerar a un modelo y otro en función de los resultados que reporten, y García, aunque defendió la innovación en la gestión, apostó porque ésta sea 100 pública.
