La farmacéutica de la Gerencia de Atención Primaria de Cantabria y coordinadora del grupo de trabajo de centros sociosanitarios de la Sociedad Española de Farmacéuticos de Atención Primaria (Sefap), Raquel Prieto, ha ofrecido una ponencia en el marco del 24º Congreso Nacional de la Sociedad, en la que ha destacado el perfil del paciente que reside en estos centros, el cual es, ha dicho, "heterogéneo", aunque a la vez "presenta unas características comunes". Entre ellas, ha establecido una media de edad de 85,7 años, además de polimedicación (una media de 12 principios activos diarios) y concurrencia de 9,2 enfermedades crónicas de media.
Todo esto lleva, según la experta, a que tengan una mortalidad un 23,6% mayor y un alto grado de dependencia, por lo que acuden más a los servicios de Urgencias y tienen más ingresos hospitalarios respecto a las personas que viven en su domicilio. Señaló, a este respecto, que estos pacientes están asociados a un gasto sanitario per cápita anual de 6.139 euros de media, "más del doble de los pacientes de referencia". El hecho de que tengan pautados tratamientos complejos que pueden originarles problemas de seguridad y falta de eficacia (por interacciones, duplicidad, etc), hace necesario, en su opinión, "que reciban una atención farmacéutica personalizada".
Y es que, según esta farmacéutica, se puede concluir que "los pacientes institucionalizados se encuentran entre los que más pueden beneficiarse de la atención farmacéutica centrada en la persona" y, en este sentido, ha opinado que el farmacéutico de Atención Primaria "es el profesional sanitario idóneo y más capacitado para prestar esta atención farmacéutica, ya que además de poder participar en todas las actividades clínicas vinculadas a la cadena terapéutica, en las actividades de gestión del conocimiento y en las actividades de gestión y control de medicamentos, aporta su papel de farmacéutico de enlace entre ámbitos asistenciales y profesionales sanitarios".
Documento de posicionamiento
Durante su intervención, Prieto ha explicado que el grupo de Trabajo de Atención Farmacéutica en Centros Sociosanitarios de Sefap está elaborando un documento de posicionamiento, qué verá la luz próximamente, en relación a la atención farmacéutica que deben recibir las personas que residen en los centros sociosanitarios. En ese marco, se habría realizado una encuesta en la que participaron los vocales autonómicos con el fin de poder ver en qué estado se encuentra la atención farmacéutica desde la Atención Primaria en las distintas comunidades autónomas.
Según los datos de la encuesta, en España existen actualmente 381.343 plazas asistenciales repartidas entre 5.700 centros sociosanitarios. El problema, según habría apuntado esta farmacéutica, es que ninguna comunidad autónoma realiza la cartera de servicios completa necesaria para llevar a cabo la atención farmacéutica centrada en la persona en centros sociosanitarios; y que en la actualidad no existe un modelo único de atención, hecho que llevado a Sefap a elaborar el citado documento.
Actividades que puede hacer el FAP
En cuanto a la atención que pueden ofrecer los FAP, ésta se podría desglosar, a su juicio, en tres tipos de actividades: la gestión y control de medicamentos y productos sanitarios; las actividades clínicas y asistenciales vinculadas a la cadena terapéutica (indicación, soporte a la prescripción médica, validación farmacéutica, preparación y ayuda en la administración de los medicamentos), y las actividades de gestión del conocimiento, tales como resolución de consultas, monitorización de la prescripción o elaboración de documentación clínica.
Para realizar las labores clínicas, ha recordado que los FAP "tienen acceso a la historia clínica electrónica de los pacientes, paso previo necesario para poder llevar a cabo la revisión farmacoterapéutica". En total, serían 10 las comunidades que ya están realizando desde la Atención Primaria la revisión y/o conciliación en estos pacientes, según la representante de Sefap. También hizo alusión a otras nueve regiones que tienen editada una Guía farmacoterapéutica para personas de centros sociosanitarios.