La Agrupación Farmacéutica de la Unión Europea (PGEU) ha hecho un llamamiento a las autoridades sanitarias para que continúen y refuercen la colaboración con los farmacéuticos comunitarios y las organizaciones de farmacia e integren a los farmacéuticos en las estrategias nacionales de vacunación.
Este llamamiento tiene que ver con la proximidad de la gripe estacional y el resurgimiento de casos de la Covid-19 en toda Europa, lo que prevén que va a suponer "una enorme carga para los servicios sanitarios, que ya están sometidos a una gran presión". "La puesta en marcha de programas de vacunación antigripal en tiempos de Covid-19 será especialmente difícil y es urgente poner en marcha campañas de vacunación eficaces que puedan ayudar a prevenir hospitalizaciones, garantizando el acceso adecuado y la aceptación de las vacunas antigripales, especialmente para los grupos de riesgo", opinan.
Su presidente, Duarte Santos, considera que aunque no sea posible detener el coronavirus todavía, sí se pueden "minimizar los efectos perjudiciales de una combinación de la Covid-19 y la gripe estacional en los sistemas de salud durante los próximos meses", por lo que alienta a los gobiernos, en nombre de la profesión, "a que hagan uso de la red de farmacias, ampliamente accesible en toda Europa, para contribuir a las estrategias de inmunización de forma eficiente y ampliar las oportunidades de vacunación".
Defiende, en este sentido, que los farmacéuticos comunitarios "son profesionales de la salud altamente capacitados y una fuente de información de confianza, y pueden desempeñar un papel clave en la identificación de pacientes en grupos de riesgo (ancianos, pacientes con enfermedades crónicas, inmunodeprimidos, etc.) y en el aumento de la confianza del público en la vacunación".
Finalmente, apremia a la colaboración estrecha de éstos "en la planificación de los programas de vacunación antigripal", para lo que deberán recibir "el apoyo y los recursos adecuados para atender a los pacientes". "Como proveedores de atención médica en primera línea, también deberían ser incluidos en los grupos de acceso prioritario para la vacuna contra la gripe", concluye.